Según un comunicado de la Organización, los ministros de Relaciones Exteriores de la región se reunirán previo a la Asamblea General para abordar la situación de Venezuela, cuya crisis lleva ya ochenta días y más de sesenta muertos en las manifestaciones fuertemente reprimidas por el gobierno de Nicolás Maduro.

Siendo el tema oficial de la Asamblea “Fortaleciendo el diálogo y la concertación para la prosperidad”, el asunto de la crisis venezolana se ubica en el epicentro del debate.

Según reporta el diario El País, un “bloque de 14 países”, entre quienes se cuenta México, Colombia, Argentina y Perú, con el respaldo de los Estados Unidos, buscarán una “resolución que condene de manera rotunda la actuación del Gobierno de Nicolás Maduro y el reclamo de que no se celebre la Asamblea Constituyente”.

Pero para llegar a un consenso, el bloque de países que se opone al gobierno venezolano necesitaría el apoyo de los países de la Comunidad del Caribe (Caricom), que frecuentemente suelen apoyar al chavismo, pues durante años se han beneficiado del petróleo venezolano subvencionado a través de Petrocaribe. Asimismo, la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, ha anunciado sus intenciones de acudir a la reunión para denunciar lo que considera “un plan intervencionista” en el proceso venezolano. Rodríguez “presentará batalla con un amplio equipo y varios ases en la manga, entre ellos, una posible propuesta de resolución sobre un asunto muy espinoso para el país anfitrión: el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa en 2014”, reportó EFE.

Habrá que recordar que fue la misma canciller Rodríguez quien anunció anteriormente la intención de Venezuela de retirarse de la Organización.

La reunión previa a la Asamblea General del día de hoy intentará retomar el diálogo suspendido el día 31 de mayo en Washington, que no logró llegar a un acuerdo entre las propuestas de declaración presentada por los cancilleres, según reporta el diario venezolano El Universal.

Durante el evento pasado, “el texto del grupo encabezado por Estados Unidos, México, Perú y Canadá pedía a Maduro ‘el cese’ de la ‘Asamblea Constituyente’, la liberación de los presos políticos y un calendario electoral con observación internacional”, continúa el reportaje.

El texto del bloque de países hacía eco de las demandas de la bancada opositora venezolana, quienes tienen 80 días en manifestaciones continuas en la calle, solicitando también la suspensión de juicios de civiles en tribunales militares, el cese de la violencia y la apertura de un canal humanitario para proveer alimentos y medicamentos que escasean en el país.

Por su parte, los países del bloque caribeño plantearon un proyecto que difería bastante del primero, tan sólo coincidiendo en la solicitud del cese de la violencia a todas las partes involucradas, un nuevo proceso de diálogo y la reconsideración de Venezuela de su decisión de dejar la Organización.

Llegar a un acuerdo no sería sencillo, pues se necesitaría el voto de 23 países para tomar cualquier decisión, representando dos tercios de los 34 países asistentes, según reportó EFE.

Para varios analistas internacionales, la reunión podría no llegar a un acuerdo de nuevo, por lo que los 14 países que se oponen a las medidas de Maduro podría explorar alternativas, como tratar de aprobar un “proyecto de resolución ya en la propia Asamblea General, donde sólo se necesitan 18 votos”.

El último recurso del bloque, si no lograran conseguir los votos necesarios, sería la emisión de una “declaración de prensa firmada con su posición sobre la crisis venezolana”.

De una u otra manera, la situación en Venezuela será el epicentro de la Asamblea, que se inaugurará esta noche de la mano del presidente mexicano Enrique Peña Nieto y concluirá el día miércoles.