LIVE STREAMING
Foto: Alcaldía de Bogotá
Foto: Alcaldía de Bogotá

Positivo balance del simulacro de cuarentena en Colombia

Una tercera parte de Colombia ha estado en simulacro de cuarentena. El ejercicio permitió a las autoridades preparar planes de contingencia y redujo la…

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Dónde está la plata?

Sobrerreacción en las bolsas

¡La FED lo vuelve a hacer!

¡Deportaciones masivas!

El misterio de los drones

¿Dinero más barato?

¿Listos para la deportación?

La alarma de los drones

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

En un ejercicio sin precedentes en Colombia, el viernes 20 de marzo una tercera parte de la población del país entró en simulacro de cuarentena, mientras varias ciudades más imponían medidas de toque de queda.

La medida del simulacro de cuarentena fue propuesta por la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, a la cual se sumaron los gobernadores de los departamentos de Cundinamarca, Meta, Boyacá y Santander.

Si bien inicialmente se hizo evidente la lucha de poder entre López y el Presidente de Colombia, Iván Duque, en la medida en que la ciudadanía se manifestó a favor del simulacro –de hecho, una petición en Change.org consigió más de 257 mil firmas a favor de la cuarentena total– y los mandatario locales se agruparon entorno a López, Duque no tuvo más opción que seguirla.

El otro factor que influyó fue que el expresidente de Colombia y mentor de Iván Duque, Álvaro Uribe Vélez, se manifestó a favor del inicio de la cuarentena puesto que, en la medida en que se salven más vidas, será posible una recuperación más temprana de la economía.

Uribe Vélez está siendo investigado por varios crímenes de lesa humanidad, pero ciertamente ha entendido con más claridad la correlación que hay entre la contención de la pandemia y la recuperación de la economía, a diferencia de López Obrador, Bolsonaro y Piñera, presidentes de México, Brasil y Chile, respectivamente.

El éxito del simulacro de cuarentena fue tal que al terminar el primer día, Iván Duque decretó el inicio de la cuarentena en todo el país a partir de las 23:59 horas del 24 de marzo hasta el 13 de abril.

De acuerdo a los informes entregados por la Alcaldía de Bogotá, durante el primer día de simulacro salió menos del 1% de la población de la ciudad y, en términos generales, la regulación de la población ha seguido siendo muy alta, aunque se hayan impuesto más sanciones con el paso de los días.

Al final del segundo día de simulacro de cuarentena, el presidente de Colombia y la alcaldesa de Bogotá anunciaron que el ejercicio pedagógico en Bogotá y todas las zonas que se habían unido se alargaría un día más, momento a partir del cual se daría continuidad con el inicio oficial de la cuarentena en Colombia.

Entre los otros logros que ha tenido la alcaldesa han estado la creación de albergues para las personas que no tienen hogar, servicios de entrega a domicilio de una canasta básica a la población más vulnerable (ya sea por su edad o, por ejemplo, porque viven de ventas informales), la entrega de 646.000 refrigerios a niños cuya alimentación depende de los colegios públicos de la ciudad, garantizar el abastecimiento constante de todas las tiendaas y supermercados de la ciudad (de hecho, durante el fin de semana entraron más toneladas de comida a Bogotá de las que normalmente ingresan), la habilitación de servicios de entrega de domicilios desde las plazas de mercado a los habitantes, el alivio a pagos de servicios públicos –en principio, para las personas con menores recursos económicos, aunque se estudia la posibilidad de que se extienda a la clase media también– y, muy especialmente, la habilitación del centro de convenciones más grande de la ciudad para que contenga 5.000 camas adicionales para Unidades de Cuidados Intensivos.

Estas 5.000 camas estarán en Corferias, el lugar en que año a año se realiza la Feria del Libro de Bogotá, la segunda más grande del continente, después de la Feria de Guadalajara. En un país con 277 casos confirmados (la mayoría en Bogotá, que es la ciudad más grande), el que se habiliten estas 5.000 camas adicionales demuestra que las autoridades esperan que la epidemia se siga agravando, lo que es inquietante sin duda, pero también que, a diferencia de muchos otros, han escuchado a los epidemiólogos, lo que va a salvar muchas vidas.

No todo ha sido color de rosa

Foto: pulzo.com

Como en cualquier ejercicio pedagógico, ha habido errores. El mayor de todos fue la salida de miles de personas por carretera justo antes del inicio del simulacro. Estas personas, que asumieron que podían tomarse del viernes al lunes para descansar, potencialmente llevaron el COVID–19 a otras zonas del país. Si bien la alcaldesa reconoce que es posible que muchas de ellas no vuelvan a la ciudad pues Bogotá también tiene mucha población flotante, que trabaja allí pero vive en pueblos cercanos, ha sido muy enfática en que quienes salieron para viajar cometieron una enorme irresponsabilidad. A su vez, el hecho ha sido ampliamente condenado en las redes sociales.

Cuando Claudia López ganó las elecciones a la alcaldía la redes sociales estallaron en comentarios de la derecha cristiana, en los que decían que la capital ahora era Sodoma, sometida al yugo de una lesbiana. Pues esa lesbiana es la que está guiando el camino para salvar a Sodoma del fuego.