
Así Residente le dijo no al progresismo colombiano
Aunque no se identifica como de izquierda, visitó a Pepe Mujica y apoyó a Chávez y Fidel Castro; ahora se ha distanciado de Petro.
René Pérez Joglar, conocido como Residente, ha sido una figura central en la música y el activismo en América Latina. Su trayectoria con Calle 13 y su posterior carrera en solitario lo han consolidado como un referente de la crítica social en la región. En las últimas semanas, su negativa a participar en un concierto promovido por el presidente colombiano Gustavo Petro, junto con su reciente Grammy, han reavivado el debate sobre su postura política y su independencia ideológica.
Desde sus inicios, Residente ha utilizado su música para abordar temas de desigualdad, derechos humanos y política. Canciones como Latinoamérica y El Aguante han sido interpretadas como manifiestos de resistencia social. Su discurso ha estado marcado por una defensa de las causas populares, pero sin alinearse completamente con sectores políticos establecidos.
Se trata de un artista comprometido. Su más reciente álbum es una queja reiterada a la falta de nivel en el arte urbano actual y por eso el título de "Las letras ya no importan", que muestra que muchos compositores y artistas claudicaron a enviar mensajes en sus canciones. No es una pelea nueva para él.
CONTENIDO RELACIONADO
En 2021, Residente protagonizó una controversia con el reguetonero J Balvin tras criticar su llamado a boicotear los Latin Grammy. En un video, Residente comparó la música de Balvin con un "carrito de hot dogs", sugiriendo que carecía de profundidad artística. Este enfrentamiento generó un debate en la industria musical sobre el contenido de las letras y la mercantilización del género urbano.
Más allá de la música, Residente ha sido un crítico constante de figuras políticas y corporativas. Ha cuestionado abiertamente a gobiernos de distintos signos ideológicos y ha denunciado violaciones de derechos humanos en diversos países. Su participación en manifestaciones y sus discursos públicos han reforzado su imagen de artista comprometido con causas sociales.
El distanciamiento con Gustavo Petro
El rechazo de Residente a participar en un evento organizado por el presidente colombiano Gustavo Petro ha sido interpretado como un mensaje de independencia política. Aunque en ocasiones ha expresado simpatía por movimientos progresistas, ha evitado vincularse directamente con líderes específicos. Su decisión ha generado reacciones diversas, desde críticas hasta elogios por mantener su autonomía ideológica.
En Estados Unidos, donde la comunidad hispana sigue de cerca el acontecer político y cultural de América Latina, Residente se ha convertido en un referente de identidad y resistencia. Su postura frente a la industria musical y la política ha resonado en un público que busca representación más allá de los discursos tradicionales. Recientemente fijó también frente a la estrategia de deportaciones masivas de Trump. En su cuenta de X dijo: "A nuestros hermanos dominicanos en Puerto Rico y a los hermanos latinoamericanos en Estados Unidos, estamos con ustedes siempre. Ningún ser humano es ilegal".
El caso de Residente refleja el papel de los artistas en el debate público contemporáneo. Su negativa a alinearse con posturas preestablecidas refuerza la idea de que la música puede ser un vehículo de crítica social sin necesidad de compromisos políticos directos. En un contexto donde la cultura y la política están cada vez más entrelazadas, su figura sigue siendo un punto de referencia para la comunidad hispana en Estados Unidos y América Latina.
DEJE UN COMENTARIO: