En su discurso de la victoria, pronunciado ante unas seis mil seguidores y unos 150 periodistas, Petro le propuso a Estados Unidos y a los demás gobiernos del continente "acelerar los pasos para la transición energética", como una manera para salvar al planeta de la crisis generada por el cambio climático. "Podemos proponer un diálogo en las Américas sin exclusiones de ningún pueblo, de ninguna nación. Llegó el momento de sentarnos con el gobierno de Estados Unidos y dialogar (...). ¿Por qué no establecemos otra manera de entendernos?", dijo en medio de los aplausos en el coliseo Movistar Arena de Bogotá.

Petro se refirió también a la diversidad que hay en el continente: "America Latina es también America afro, América indígena, América anglosajona".

La mayoría de las encuestas daban empate técnico entre Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, quienes llegaron a la segunda vuelta tras lograr las dos mayores votaciones en pasado 29 de mayo. Petro logró 11.281.013 votos. mientras de Hernández sumó 10.580.412. Los votos en blanco fueron 501.987, representando el 2,24%,

En su cuenta de Twitter, Hernández dijo: "Llamé a Gustavo para felicitarlo por el triunfo y ofrecerle mi apoyo para cumplir  con las promesas de cambio por las que Colombia votó hoy. Colombia siempre va a contar conmigo".

A su turno, el presidente Iván Duque quien termina su periodo el próximo 7 de agosto, también se manifestó por Twitter. "Llamé a @PetroGustavo para felicitarlo como presidente electo de los colombianos. Acordamos reunirnos en los próximos días para iniciar una transición armónica, institucional y transparente", dijo.

La gente esperó pacientemente la llegada de Petro y de Francia Márquez. la segunda colombiana que ocupa ese alto cargo y la primera afrocolombiana. Sobre las 7 de la noche apareció Francia. . “215 años después el pueblo toma el poder”, dijo mientras los asistentes aplaudían y gritaban su nombre. Hizo un reconocimiento a los excluidos y a las víctimas del conflicto armado, como ella. La acompañaban en la tarima su familia, la de Petro y otros líderes políticos.

El presidente electo habló durante algo más de 40 minutos, interrumpido por la gente que gritaba "Sí se pudo" insistentemente.  Petro invitó a sus opositores a hacer un acuerdo para sacar al país de la crisis y lograr la paz. "No es matarnos los unos a los otros. Es amarnos los unos a los otros", manifestó. Además expresó que "tenemos que construir una democracia a partir de permitir que exista un pluralismo de conciencias, un pluralismo ideológico, un pluralismo de colores, un pluralismo económico".

En otro aparte del discurso se refirió al capitalismo, precisamente uno de los temas que sus opositores han tenido como bandera, en el sentido de que él seguiría las políticas de Hugo Chávez. "Nosotros vamos a desarrollar el capitalismo en Colombia, no porque lo adoremos, sino porque tenemos que superar primero la premodernidad, el feudalismo.", señaló.

Petro ha sido alcalde de Bogotá y uno de los más destacados senadores colombianos. Es un hecho histórico, ya que Colombia nunca ha tenido un jefe de Estado de izquierda. El pasado 13 de marzo, en las elecciones para Congreso, el Pacto Histórico logró la mayor votación, también un hecho insólito en la política colombiana.

En los años 80, Petro fue miembro de la guerrilla del M-19, organización armada de izquierda no marxista que en 1990 firmó un acuerdo de paz y dejó las armas. Como parte de esa negociación, se convocó una Asamblea Constituyente, que en 1991 reformó la Constitución.

La victoria de Petro implica un cambio importante en el mapa político del continente, sumándose a la victoria de Gabriel Boric, en Chile, y de Xiomara Castro, en Honduras, configurándose una nueva izquierda en la región. A ellos se sumaría Luiz Inácio Lula Da Silva, favorito en las presidenciales de octubre en Brasil.

Internamente significa la implementación efectiva del acuerdo de paz con las extintas FARC firmado en 2016, pero aplicado tibiamente por el actual gobierno, cuyo partido Centro Democrático se opuso a las negociaciones de paz. Implica una profunda reforma agraria para beneficiar a millones de campesinos víctimas de la guerra y la presencia del Estado en varias regiones en manos de organizaciones armadas ilegales.

También representa cambios en la política social y en la política económica, la defensa del medio ambiente, la suspensión del fracking y un proceso de transición energética a 12 años. Asimismo, se promoverá la revisión de los tratados de libre comercio y el impulso a una nueva industrialización del país. En la agenda también está la revisión con Estados Unidos de la política antinarcóticos, el retorno al multilateralismo en la política internacional y el descongelamiento de las relaciones con Venezuela, que ha afectado drásticamente a las poblaciones de la frontera,