Mientras que en la primera década del siglo XXI la pobreza en la región descendía, coyunturas como las de la pandemia y la guerra en Ucrania han generado nuevamente un fuerte incremento en los niveles de pobreza e inseguridad alimentaria.

Citando un informe especial de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) presentado el pasado junio, los países de la región se encuentran ante una desaceleración del crecimiento económico, una mayor presión inflacionaria y una recuperación lenta e incompleta de los mercados laborales de las repercusiones de la pandemia del COVID-19. En consecuencia, de acuerdo con el organismo, los niveles de pobreza y la inseguridad alimentaria seguirán aumentando.

El reporte prevé que el crecimiento anual promedio del PIB en 2022 será de un 1.8 %, mientras en 2021 todavía era de un 6,3 %. Asimismo, la inflación regional pasará del 6.6 % en 2021, al 8.1 % en 2022, mientras que la pobreza aumentaría del 29.8 % en 2018, al 33.7 % en 2022, y la pobreza extrema del 10.4 % en 2018 al 14.9 % este año, lo que se traduce en un incremento en la pobreza extrema por sexto año consecutivo.

El número de pobres en #AmLat se incrementó durante la pandemia en 14 millones. Es imperativo regresar a la trayectoria de las dos décadas anteriores cuando la pobreza se redujo en 25 puntos porcentuales. https://t.co/0VQmLfXhu9 pic.twitter.com/hlzBs4qfiV

— Banco Mundial | América Latina y el Caribe (@BancoMundialLAC) October 17, 2022

Día Mundial de la Erradicación de la Pobreza

En el marco de esta fecha, Christof Wünsch, director del departamento para América Latina de la organización de ayuda alemana "Brot für die Welt" (Pan para el mundo), declaró en entrevista con DW:

Lo que observamos, y también lo que nos comparten nuestros socios en el continente, es que la situación es realmente dramática y que, lamentablemente, los niveles de pobreza seguirán aumentando

Posibles detonantes 

Dentro de las razones que exponen los especialistas para la agudización de esta crisis humanitaria, sobresalen: 

• La persistencia de la pandemia por COVID-19 que afecta directamente el mercado laboral y las cadenas de suministro.
• La guerra en Ucrania, cuyos efectos golpean especialmente en los sectores de producción primaria como petróleo, gas, aluminio y cereales y otras ramas industriales que producen insumos necesitados en la agricultura, como por ejemplo, fertilizantes.

Incertidumbre política 

Wünsch también señala que la falta de voluntad política para redistribuir las riquezas que hay en el continente es uno de los factores que más influyen en el aumento de la pobreza.

Asimismo, el funcionario destaca una serie de cambios que deberían adelantarse en la región para generar una verdadera diversificación industrial.

“Lo que América Latina realmente necesita es un cambio del modelo económico puramente extractivo”, resaltó Wünsch.

Para concluir, Wünsch también destaca la labor de las ONGs en la lucha contra la pobreza, pero señala que la labor de estas continúa restringida en muchos países, como por ejemplo en Nicaragua, donde el gobierno ha ordenado cerrar cerca de 1.500 entidades desde 2018.