Nacida y criada como neoyorquina de Queens, Roxanna Alvarado se encuentra ahora en un entorno completamente diferente en el Middlebury College, en el estado de Vermont. Cuando sus padres emigraron de Nicaragua hace casi 30 años, eligieron la ciudad de Nueva York por su título de "ciudad de las oportunidades". Poco sabían que sus dos hijas -Roxanna y su hermana, Elsa Alvarado- acabarían encontrando oportunidades en una universidad donde la naturaleza es mucho más común que los rascacielos. 

Roxanna es una orgullosa nativa de Nueva York, y atribuye gran parte de su conocimiento y aprecio por otras culturas al hecho de haber crecido en una ciudad donde la diversidad está en cada esquina -y lo dice literalmente, teniendo en cuenta los múltiples restaurantes de todas las cocinas en toda la ciudad; una de sus cosas favoritas de la Gran Manzana. 

Al crecer en un hogar fuertemente latino, Roxanna dudaba al principio de asistir a Middlebury College, ya que es una institución predominantemente blanca, dijo. Tenía miedo de cómo se identificaría y de si experimentaría un choque cultural. Sin embargo, el nerviosismo inicial se transformó en un sentimiento de pertenencia, el colegio tiene como prioridad incluir a personas de todos los orígenes y crear espacios seguros para la gente de color, explicó Roxanna. 

Aunque a veces se siente rara por ser la única latina en una habitación, le gusta recordar los valores que su hermana, que es una ex alumna latina del Middlebury College, compartió con ella: "tienes que sentir que perteneces porque perteneces". 

"No debes sentirte inferior en ningún sentido porque te mereces estar en esa aula tanto como todos los que están allí", dice Roxanna a sus amigas cada vez que se sienten fuera de lugar.   

Ahora, totalmente adaptada al nuevo entorno como estudiante de segundo año de biología molecular en Middlebury, Roxanna fue galardonada con el Fondo de Becas Hispanas 2022 (HSF); un logro importante en su vida. Comenzó a solicitar becas con el objetivo de ayudar a reducir la matrícula que sus padres tendrían que pagar para que ella obtuviera un título. Conoció el HSF a través de su hermana, que es una ex becaria, ya que la recibió hace más de 10 años. 

"El dinero de las becas se utiliza para financiar la educación", dijo. "Sin él, muchas personas, especialmente las que provienen de familias latinas de clase media baja, tendrían que preocuparse por los préstamos o simplemente no podrían asistir a la universidad". 

Como gran defensora del Fondo de Becas Hispano, Roxanna recomienda a todos sus amigos de origen hispano que lo soliciten. Ella explica que el proceso de solicitud pide información básica y de ayuda financiera; pero destaca que la sesión de ensayos cortos es la más importante. Con preguntas como: 'cuáles son tus ambiciones', 'cómo te identificas como persona' y 'qué te hace destacar de todos los que han solicitado', Roxanna cree que esta sesión es el componente determinante para ser seleccionado o no. 

Aconseja a los estudiantes que, antes de presentarse a cualquier oportunidad, pongan en perspectiva lo que quieren hacer en el futuro, lo que les apasiona y lo que les hace querer tener éxito.  

En su caso, se inspiró en una redacción que escribió al solicitar plaza en Middlebury. En aquel momento, escribió sobre la traumática experiencia de su madre al tener hijos sin seguro médico en Estados Unidos. Roxanna decidió que, en el futuro, quiere evitar que otras madres latinas tengan que pasar por las dificultades que sufrió su madre. Al pensar en lo que la distingue de las demás, responde que sus aspiraciones no son sólo el éxito personal, sino también el éxito del legado de su familia como inmigrantes. Su felicidad y su alegría por ayudar a otros necesitados son evidentes en su objetivo de poder ayudar a las comunidades pobres con una atención médica asequible.   

Roxanna empezó a solicitar oportunidades de becas cuando estaba en el primer año de instituto. Por aquel entonces, trabajaba en un consultorio médico en Brooklyn, Nueva York. Un punto de inflexión en su vida como experiencia práctica porque le permitió ver cuántas personas necesitaban atención médica en la ciudad, especialmente las que eran indocumentadas y no podían pagar las consultas médicas. La doctora con la que trabajó, la Dra. Ada Anon, cobraba bastante menos que otros, lo que hacía que fuera asequible para las comunidades necesitadas. Ella fue la que inspiró a Roxanna a alcanzar el éxito y poder ayudar a los demás. 

Desde entonces, Roxanna no ha dejado de solicitar oportunidades y experimentar lo que la ciudad podía darle. En su segundo año de instituto, solicitó hacer una investigación en la Escuela de Ingeniería Tandon de la Universidad de Nueva York, centrándose en la biología celular y molecular. Gracias a su trabajo allí, fue galardonada con la beca científica Pinkerton, en 2019. 

A pesar de su impresionante currículum, a Roxanna le gusta recordar que aunque algunas personas hayan ganado muchos premios y hayan logrado grandes cosas, no significa que no hayan perdido muchas otras. En su caso, se presentó al HSF durante la pandemia, en 2020, pero no lo consiguió. Aunque le costó al principio, se mantuvo motivada -sobre todo por los ánimos de su hermana- y volvió a presentarse al año siguiente, teniendo éxito. 

"Tienes que seguir intentándolo y ser persistente, y al final lo conseguirás", dijo. 

Al hablar de cómo encontrar becas, la plataforma favorita de Roxanna es LinkedIn. No sólo para encontrar oportunidades, sino también para establecer una red de contactos y eventualmente descubrir otras posibilidades. A los estudiantes de secundaria, les aconseja que hablen con los alumnos de cursos superiores que hayan obtenido becas para que les ayuden. Los antiguos alumnos son una gran fuente de información y orientación, dice. El bueno de Google tampoco defrauda. Una simple búsqueda de becas hispanas puede presentar a los estudiantes una variedad de oportunidades - como HSF y la Fundación de la Herencia Hispana, que Roxanna también recibió en 2022. 

  Además del dinero y el reconocimiento, uno de los aspectos más sorprendentes de ganar una beca es la posibilidad de establecer contactos, y Roxanna lo está aprovechando. Cuando asiste a las ceremonias de entrega de premios, se asegura de relacionarse con otros estudiantes de su edad que tienen objetivos similares. Más adelante, cree que estas personas pueden ser grandes recursos profesionales. 

Roxanna se describe a sí misma como una persona apasionada y motivada, que quiere que su familia se sienta orgullosa de haber emigrado a Estados Unidos. Aunque Roxanna tiene logros a largo plazo que las becas que ganó le están ayudando a alcanzar, sus metas inmediatas son más locales, en Middlebury. Al ser coordinadora de guías turísticos, trabaja estrechamente con la oficina de admisión; donde a menudo se acercan a ella familias que sólo hablan español o personas que quieren conocer su experiencia como persona de color en Middlebury. 

"Me gusta ayudarles a que se sientan cómodos para entrar en Middlebury", dijo. 

Más allá en el futuro y cerca en el presente, la impulsa su pasión por ayudar a la gente.