El Palacio de Palacio de Iturbide, en el centro de Ciudad de México, alberga una de las colecciones de arte y antigüedades más valiosas del país latinoamericano. El centro, más conocido como Fomento Cultural Citibanamex, pertenece a Banamex, la institución financiera más antigua del país, propiedad de Citigroup,  pero ahora éste acaba de anunciar que pone a la venta su división mexicana, poniendo en peligro el valioso patrimonio cultural de la colección. 

La colección alberga no solo objetos de arte que permiten trazar la historia de México hasta la independencia de España, en 1821, sino también algunas de las obras más significativas de José María Velasco, Clausell, Ángel Zárraga, Orozco, Diego Rivera, Dr. Atl, Frida Kahlo, Siqueiros, Remedios Varo y Manuel Felguérez. También se han destacado los inmuebles y una prestigiosa colección de arte popular.

“Esta notable conjunción nos permite admirar más de 5 mil piezas de arte popular, creadas por más de 800 grandes maestros provenientes de los 32 estados de la República Mexicana. Podemos apreciar la variada producción artesanal de México, la cual se ha transformado según las regiones, los grupos étnicos, los materiales o las técnicas que se manejan en cualquiera de las 347 localidades incorporadas”, escribe en La Jornada la periodista mexicana Ángeles González Gamio.

La colección incluye trabajos artesanos de numerosas etnias que habitan las zonas rurales de México (mazahua, otomí, nahua, rarámuri, huichol, mayo, tzotzil, maya, mixteca y zapoteca, entre otras), “que nos llevan a conocer la pluralidad cultural, diversidad geográfica, étnica y lingüística que existe en nuestro país”.

Desde que Citigroup anunció la puesta a la venta de Citibanamex el pasado 11 de enero, los medios de comunicación nacionales han puesto el grito en el cielo para asegurar que la colección se mantenga intacta y, sobre todo, no salga de México.

Eso, sin embargo, no será tan fácil, pues muchas de las obras de arte de la colección de Fomento están protegidas por las leyes federales mexicanas que exigen que los objetos de importancia cultural nacional permanezcan en el país.

En una conferencia de prensa el 13 de enero, el director corporativo de Citibanamex, Alberto Gómez Alcalá, trató de aliviar los temores de que los tesoros de Fomento pudieran terminar en el extranjero, subrayando que sus activos "serán parte integral e indivisible" de la "desinversión y venta" de Citibanamex.

Mientras tanto, se han barajado varios los posibles compradores potenciales de Banamex, como el multimillonario mexicano Ricardo Salinas, el banco HSBC o la startup brasileña de tecnología financiera Nubank.

El 26 de enero, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo en su conferencia de prensa matutina diaria que el banco debía ser propiedad de los mexicanos y que su departamento de Hacienda estaba haciendo números sobre el valor exacto de sus activos.