México ha sido uno de los conjuntos más regulares en los últimos seis Campeonatos del Mundo. En todos ellos, el cuadro hispanoamericano ha salvado la primera ronda del certamen, a pesar de verse emparejado con rivales complicados como, por ejemplo, Italia, Portugal y Brasil. Sin embargo, los mexicanos no han podido superar, en ninguna de estas seis ocasiones, la ronda de octavos de final. 

Más que por deméritos propios, las eliminaciones de los mexicanos han estado ligadas a la calidad de sus rivales. En cuatro de los seis torneos, México se ha tenido que medir a tres países -Argentina (dos veces), Alemania y Holanda- que, sumando esfuerzos, han estado presentes en trece de las últimas once finales mundialistas. 

En Francia 1998, los mexicanos tuvieron contra las cuerdas a los alemanes, a quienes dominaban, 1-0, a falta de 15 minutos para el final.

Sin embargo, acabaron sucumbiendo por 2-1. Contra los Países Bajos, en Brasil 2014, las cosas fueron idénticas.

México también se adelantó a inicios de la segunda parte, pero vio como un cruel penalti decantó la balanza a favor de los holandeses ya en el tiempo de descuento. En Alemania 2006, los mexicanos forzaron la prórroga contra Argentina, pero también acabaron cayendo por dos goles a uno. 

La fácil clasificación lograda para Rusia 2018, en un hexagonal en que México no perdió un solo encuentro hasta tener su billete para la Copa del Mundo, llenó de esperanza a la fiel afición tricolor. Sin embargo, el sorteo mundialista vuelve a poner en entredicho el futuro mexicano en el torneo más importante del mundo. ¡La suerte no había podido ser más caprichosa! El cuadro latino ha quedado enclavado en el Grupo F, al que podríamos llamar “de la muerte”, junto con el vigente campeón, Alemania, la difícil selección de Suecia y una Corea del Sur, a la que México ya se ha enfrentado en anteriores campeonatos.

Sin embargo, la mala fortuna no acaba aquí, sino que continúa en un cruce de octavos de final que vuelve a preverse fatídico. Si los mexicanos no ganan su grupo, se las tendrán que ver con el primer clasificado del Grupo E, donde la clara favorita es una selección brasileña que se encuentra en su mejor nivel.

Quedan todavía poco más de seis meses para que el balón comience a rodar en Rusia 2018. Tiempo suficiente para que el veterano entrenador colombiano, Juan Carlos Osorio, prepare a la selección mexicana para volver a recorrer un camino complicadísimo en una Copa del Mundo. Es cierto, la suerte ha sido de nuevo esquiva para el cuadro tricolor, pero quizá tirando de experiencia pueda encontrar la forma de doblegar a los potentísimos Alemania y Brasil para plantarse por primera vez en unos cuartos de final desde 1986.