Para reconocer el impacto que las mujeres han tenido a lo largo de la historia de Estados Unidos, la Casa de la Moneda está creando monedas de 25 centavos de acuñación única que representan a mujeres influyentes de diversos orígenes y con historias de éxito. El programa se extenderá de 2022 a 2025.

Este año se acuñará la primera moneda de 25 centavos afrolatina, Celia Cruz, cantante de salsa cubana y una de las músicas latinas más prolíficas del siglo XX.

"Todas las mujeres homenajeadas han vivido vidas extraordinarias y polifacéticas, y han tenido un impacto significativo en nuestra nación a su manera", dijo Ventris C. Gibson, Director de la Casa de la Moneda de EE.UU., en un comunicado de prensa.

"Las mujeres fueron pioneras del cambio durante sus vidas, sin ceder al status quo impartido durante sus vidas. Al rendir homenaje a estas mujeres pioneras, la Casa de la Moneda continúa conectando América a través de monedas que son como pequeñas obras de arte en tu bolsillo", continuó.

Cruz tuvo una ilustre carrera, reconocida como una de las artistas más célebres de la música latina. Ha sido galardonada con 23 álbumes de oro, tres premios Grammy, cuatro premios Grammy Latinos y la Medalla Nacional de las Artes del Presidente. Además, fue galardonada con un Lifetime Achievement Award póstumo en los Grammy de 2016.

Nacida en La Habana (Cuba) en 1925 con el nombre de Úrsula Hilaria Celia de la Caridad Cruz Alfonso de la Santísima Trinidad, Cruz creció en el barrio obrero de Santos Suárez, donde conoció a numerosos músicos e intérpretes de diversos orígenes, una experiencia que influiría en su futura carrera musical. 

Los primeros trabajos de Cruz comenzaron con actuaciones emitidas por emisoras de radio locales, y su primer tema se grabó en Venezuela en 1948.

Más tarde se convertiría en la cantante principal de la Sonora Matancera, una orquesta afrocubana considerada la más popular de Cuba. A lo largo de su carrera, Cruz se hizo famosa por cantar guarachas, un estilo de música cubana de ritmo rápido y letras picarescas o cómicas.

Fue durante esta época cuando adoptó su grito característico, "¡Azúcar!", que utilizaba como interjección en canciones y actuaciones y como una especie de grito de guerra en recuerdo de los africanos que habían sido esclavizados en las plantaciones azucareras cubanas.

Durante una gira por México en 1960, la Sonora Matancera renunciaría al gobierno de Fidel Catro en Cuba, lo que provocaría su exilio; algo de lo que Cruz no se enteraría hasta 1962, cuando intentó regresar a Cuba para asistir al funeral de su madre, petición que le fue denegada.

Con un estilo en constante evolución, Cruz no sólo interpretó salsa, sino también rumba, reggaetón e incluso protagonizó películas. 

A lo largo de su carrera, grabó más de 80 álbumes, ganó su primer Grammy en 1990 y fue reconocida como una de las principales influyentes que llevaron la salsa a la fama internacional.

Aunque falleció en 2003, el legado de Cruz sigue vivo a través de su música, y el cuarto de dólar pretende inmortalizarlo en una moneda.

Cruz se unirá a las numerosas mujeres que han marcado la historia, siendo reconocida junto a mujeres como la sufragista de Nuevo México Nina Otero-Warren y la actriz asiático-americana Anna May Wong.