Pero Donald Trump podría en realidad utilizar el colapso legislativo para solucionar la atención médica si volviese a los fundamentos y a sus convicciones centrales en esta temática, los cuales son sorprendentemente inteligentes y consistentes. 

Hay un impulso comprensible en la derecha, de asumir que la seguridad médica funcionaría con más eficacia si fuese un mercado libre o un mercado más libre. Esto es cierto para la mayoría de los bienes y servicios. Sin embargo, en 1963, el economista Kenneth Arrow, quién luego ganó el premio nobel, ofreció una explicación en cuanto a por qué los mercados no funcionarían bien en esta área. Argumentó que había un gran desajuste de poder e información entre el comprador y el vendedor.

Si un vendedor le aconseja que compre una televisión particular, uno puede elegir otra con facilidad o sencillamente retirarse. Si un médico le insiste que necesita una medicina o un procedimiento, habrá muchas menos probabilidades de que usted rechace su consejo. Además, Arrow señaló que las personas piensan que no necesitan la atención médica hasta que se enfermen, y luego necesitan mucha. 

Toda economía avanzada en el mundo ha implícitamente aceptado su argumento debido a que todos han adoptado alguna versión de un sistema dirigido por el Estado para la atención médica. Tengamos en cuenta los 16 países que tienen un rango superior que Estados Unidos en el índice de libertad económica elaborado por la Heritage Foundation. Todos excepto Singapur (que posee un enfoque único dirigido por el Estado) poseen sistemas de atención médica universales que pueden ser descritos como de un solo pagador (Medicare para todos), atención médica dirigida por el gobierno (el modelo británico) o Obamacare-plus (seguro privado con un mandato real al que todos se adhieren). 

Durante la producción de un documental para la CNN sobre los sistemas de atención médica alrededor del mundo, me sorprendió en especial la experiencia de Taiwán, otro puerto de mercado libre. En 1995, el 40 por ciento de su población no estaba asegurada y el país poseía resultados sanitarios muy pobres. El gobierno decidió encuestar al mundo acerca de las mejores ideas antes de instituir una nueva estructura. Eligió a Medicare para todos, pagado únicamente por el gobierno, con múltiples proveedores privados. Los resultados son asombrosos. Taiwán ha alcanzado uno de los mejores resultados del mundo al pagar solo el 7 por ciento de su PIB en la atención médica (en comparación con un 18 por ciento en Estados Unidos). Le pregunté a William Hsiao, un economista que ayudó a idear el modelo del país, qué lecciones aprendieron, si las hubo, de Estados Unidos. “Uno puede aprender qué NO hacer de Estados Unidos en vez de aprender qué hacer”, contestó. 

Los estadounidenses casi siempre asumen que a pesar de su costo, la atención médica estadounidense ofrece mejores servicios que otros. Generalmente escuchamos acerca del tiempo que se necesita esperar para recibir atención médica en otros países. Pero de acuerdo al Fondo del Commonwealth, entre los países industrializados, Estados Unidos se encuentra en el medio del paquete en cuanto al tiempo de espera, detrás de incluso el Reino Unido. Además, uno de los mayores expertos del mundo, Uwe Reinhardt de Princeton, ha encontrado que los estadounidenses utilizan menos atención médica que el medio de los países desarrollados cuando se trata de cuestiones tales como ver al médico o pasar tiempo en el hospital. El problema con el mercado libre radica en que hay poco provecho de la prevención y varios en cuidados en casos de crisis. 

Actualmente, Trump ha aceptado la demanda de revocar Obamacare. Sin embargo, hasta hace poco, la atención médica era, en realidad, uno de los temas raros acerca de los cuales había opinado antes de su campaña, con una consistencia remarcable. En su libro del 2000, “El Estados Unidos que merecemos”, escribió:

“Soy conservador en la mayoría de los temas pero liberal en este. No deberíamos escuchar tantas historias de familias arruinadas por gastos de la atención médica ... Debemos tener una atención médica universal ... El plan canadiense ... ayuda a los canadienses a vivir más tiempo y más saludablemente que los estadounidenses. Hay menos demandas médicas, menos pérdidas de trabajo debido a enfermedad, y menos costos de las empresas que pagan la atención médica de sus empleados ... Necesitamos, como nación, reexaminar el plan de pagador único, tal como lo están haciendo varios Estados individuales”. 

Trump estaba en lo cierto en esta temática durante la mayor parte de su vida. Ahora ha cedido a intereses personales y a una ideología que proviene de hechos. Podría simplemente volver a sus convicciones, tender la mano a los demócratas y ayudar a Estados Unidos a solucionar su crisis en la atención médica.