El presidente Trump declarará una emergencia nacional en un intento de obtener fondos para su anhelado muro fronterizo, después de haber fracasado una vez más al negociar un acuerdo con el Congreso para financiar su promesa de campaña más prominente.

A pesar de haber accedido a firmar un acuerdo de gastos bipartidista para mantener al gobierno abierto hasta septiembre, evitando así otro cierre, su declaración de una emergencia nacional es un último esfuerzo que probablemente terminará en los tribunales.

"El presidente Trump firmará el proyecto de ley de financiamiento del gobierno y, como lo ha dicho anteriormente, también tomará otras medidas ejecutivas, incluida una emergencia nacional, para garantizar que logremos detener la crisis de seguridad nacional y humanitaria en la frontera", dijo la Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders tuiteó.

"El presidente una vez más está cumpliendo su promesa de construir el muro, proteger la frontera y asegurar nuestro gran país", agregó.

El acuerdo de gastos incluye $ 1.375 mil millones para la seguridad fronteriza, pero no otorgará dinero para el muro de Trump.

El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, ya ha expresado su apoyo a la declaración de emergencia nacional planificada por el presidente.

Sin embargo, muchos en ambos lados del pasillo se oponen a la medida extrema.

Para los demócratas, la principal preocupación es el hecho de que no existe una emergencia real: las acciones del presidente son solo una táctica abierta para mantener su leal base de partidarios. Para los republicanos de ella, la preocupación es el precedente que esta acción crearía para, por ejemplo, los presidentes demócratas que deseen abordar temas como el cambio climático, el control de armas o la atención médica universal.

De hecho, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, advirtió que un "presidente demócrata también puede declarar emergencias".

Además, el New York Times informó que: "los expertos legales han dicho que el Sr. Trump tiene un caso plausible en el sentido de que puede tomar tales medidas de acuerdo con la ley actual, pero seguramente provocará un desafío judicial por parte de los críticos que argumentarán la usurpación de dos siglos de control del Congreso sobre el gasto".

Actualmente, Estados Unidos tiene 31 emergencias nacionales activas, 26 de las cuales tratan de "sanciones o restricciones a la exportación", según el Washington Post. Trump ha declarado tres emergencias nacionales relacionadas con las sanciones durante sus dos años en el cargo.

Mientras tanto, las detenciones en la frontera entre la nación y México se redujeron de 1,64 millones de personas en 2000 a 397,000 registradas en 2018, una caída del 75 por ciento.