Los estadounidenses plenamente vacunados no están todavía fuera del peligro del COVID.

Se espera que las autoridades sanitarias de la Administración Biden anuncien que todos los estadounidenses que hayan recibido las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 deberán recibir una vacuna de refuerzo ocho meses después de recibir la segunda dosis para reducir las posibilidades de contraer el coronavirus.

También se anunció que las vacunas de refuerzo podrían estar disponibles a partir del próximo mes.

Los refuerzos también limitarán las posibilidades de contraer la variante Delta, una cepa contagiosa que está llevando a miles de personas al hospital.

El New York Times informó de que podría emitirse una declaración oficial esta misma semana. La nueva política dependerá de que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) autorice más vacunas. 

El lunes 16 de agosto, Pfizer y BioNTech anunciaron la presentación de datos iniciales a la FDA de EE.UU. para demostrar que una vacuna de refuerzo protegerá a los ciudadanos contra la variante Delta.

"Dados los altos niveles de respuesta inmunitaria observados, una dosis de refuerzo administrada entre seis y doce meses después del programa de vacunación primaria puede ayudar a mantener un alto nivel de protección contra el COVID-19", dijo la empresa en un comunicado.

El pasado jueves 12 de agosto, las autoridades dijeron originalmente que las vacunas de refuerzo estarán disponibles para las personas inmunodeficientes y los ciudadanos que hayan recibido tratamientos de quimioterapia. 

Sin embargo, es más probable que los refuerzos se dirijan primero a los ancianos de las residencias y al personal de los hospitales. 

"La vacunación es nuestro medio más eficaz para prevenir la infección por COVID-19 -especialmente la enfermedad grave y la hospitalización- y su profundo impacto en la protección de vidas es indiscutible", dijo Albert Bourla, presidente y director ejecutivo de Pfizer.

Las vacunas de refuerzo serán las mismas que se administraron originalmente a los residentes, como Pfizer y Moderna.

El New York Times también informó que los receptores de la vacuna de Johnson & Johnson, que se administra una sola vez, también necesitarán una dosis adicional.

El Dr. Ugur Sahin, director general y cofundador de BioNTech, declaró que la empresa está trabajando sin descanso para asegurarse de que habrá vacunas de refuerzo para todos, ampliando el acceso a su vacuna.

"Nos esforzamos continuamente por ir al menos un paso por delante del virus", dijo. "Estos datos iniciales indican que podemos conservar e incluso superar los altos niveles de protección contra el virus de tipo salvaje y las variantes relevantes utilizando una tercera dosis de nuestra vacuna. Una vacuna de refuerzo podría ayudar a reducir las tasas de infección y enfermedad en las personas previamente vacunadas y controlar mejor la propagación de las variantes del virus durante la próxima temporada."

La variante Delta, una cepa dos veces más contagiosa, es la principal razón por la que los Estados Unidos están viendo un aumento de los casos de COVID-19.

Sólo el 59,4% de los estadounidenses de 12 años en adelante están totalmente vacunados contra la COVID-19, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Sin embargo, muchos estadounidenses todavía no han recibido su segunda dosis. De hecho, alrededor del 72,1% de los adultos sólo han recibido una dosis, y el 59% de los estadounidenses mayores de 12 años están completamente vacunados, según el New York Times.