Cuando Donald Trump llegó a la Casa Blanca, todos sabíamos que su última preocupación era la de abrazar la comunidad hispanohablante del país, aquellos a quienes había llamado “bad hombres” durante su campaña, en una generalización que no haría sino perpetuarse a través de sus políticas administrativas.

A tan sólo días de estar en el poder, su Administración clausuró la versión en español de la página web de la Casa Blanca, asegurando que los encargados de la tecnología “estaban trabajando sobre la marcha para desarrollar un nuevo sitio”, como recuerda The Associated Press.

Durante el mes de julio la directora de los Asuntos de Medios Informativos, Hellen Aguirre Ferre, prometía que la página web sería lanzada nuevamente a finales de año. Pero ya estamos en el mes de Febrero y la Casa Blanca sigue sin hablar español, a pesar de que “alrededor de 1 entre 5 estadounidenses hablan español”, según continúa el medio.

Frente a las preguntas de AP con respecto al asunto, ahora Aguirre ha respondido con evasivas asegurando que “seguimos trabajando para mejorar la plataforma de la Casa Blanca ofreciendo contenido importante en inglés con respecto a las iniciativas y las políticas que la Administración Trump está implementando”, según respondió en un correo.

Para Javier Palomarez, presidente y director ejecutivo de la Cámara de Comercio Hispana de Estados Unidos, la eliminación de la versión en español de la página “envía un mensaje preocupante”.

“Existen alrededor de 4 millones de hispanos americanos emprendedores y empresarios en este país, muchos de los cuales son receptivos a la agenda pro-empresarial de la administración”, aseguró. “Si hicieran aunque fuera un pequeño esfuerzo para comunicarse y conectarse con la comunidad latina, quizás se ganarían a alguno de ellos”.

Esta iniciativa despegó durante la administración Bush, cuando los latinoamericanos se transformaron en la minoría más grande del país, y continuó sus esfuerzos durante el gobierno de Barack Obama. Luis Miranda, director de los medios de comunicación hispanos durante la administración Obama, aseguró que el sitio en español estaba destinado a informar a los latinos “sobre tópicos como inmigración, salud, banca y asuntos veteranos”, temas muy sensibles en el momento actual.

Si bien la cuenta en español de @LaCasaBlanca está activa, así como las plataformas de Voice of America y varios servicios locales de gobierno.usa.gov, el esfuerzo de esta administración por incluir a todos sus ciudadanos se queda corta.

AP compara la actuación del gobierno de Trump con el de países como Irán y Corea del Norte, con quienes el presidente se ha enganchado en polémicas y criticismos pero que sí poseen sus plataformas hispanohablantes.

Es poco probable que esto cambie con el tiempo, en especial tras ver los esfuerzos del gobierno de Trump por andar en dirección contraria cuando de conciliación se trata con los latinoamericanos.