El lunes 13 de febrero, víspera del día de San Valentín de 2023, Luis García, de 16 años, se encontraba en su coche cerca del instituto Denver East sobre las 14:30 horas, cuando unos individuos le dispararon apuntando desde un coche que pasaba. 

Según Joe Montoya, jefe de la división de investigaciones del Departamento de Policía de Denver, el tiroteo provocó el cierre del instituto y el ingreso de García en el hospital con "pronóstico reservado". Dos horas después del tiroteo, un joven de 17 años y otro de 16 serían detenidos en relación con las investigaciones sobre tenencia ilícita de armas de fuego y robo de vehículos, pero no estaban relacionados con el tiroteo de García. La investigación sigue abierta a día de hoy.

Más de dos semanas después, el 1 de marzo, García murió tras serle retirado el soporte vital, dejando conmocionados a su familia, a la escuela y a la comunidad circundante.

Según averiguaría The Denver Post al entrevistar a la familia y amigos de García tras su muerte, el joven de 16 años era descrito como "un trabajador extremadamente duro" que sacaba buenas notas en el colegio, destacaba en el campo de fútbol y tenía múltiples trabajos para mantener a su familia en casa.

"Luis siempre ayuda a su familia en todo lo que puede", declaró su hermano, Santos García, a The Denver Post en una entrevista en febrero. 

En el campo de fútbol, García fue miembro del equipo de fútbol 5A Colorado State Champion Denver East Angels. Fue uno de los jugadores suplentes que vio cómo su equipo se deshacía de Fairview High School por 1-0 en el campeonato estatal del año pasado.

Cuando la noticia del tiroteo llegó a sus compañeros de equipo, se unieron en torno a su hermano Santos para iniciar un GoFundMe y recaudar dinero para pagar las facturas del hospital de Luis. Hasta la fecha, el GoFundMe ha recaudado más de 200.000 dólares para ayudar a su familia con cualquier gasto.

"No hay lugar para este tipo de violencia en el mundo y especialmente en la escuela", dice una parte de la descripción de GoFundMe.

Llevando ese mensaje al siguiente nivel, tras la noticia de la muerte de García el 1 de marzo, sus compañeros de clase celebraron una vigilia fuera de Denver East High School el jueves 2 de marzo.

"Luis siempre fue alguien que puso un esfuerzo extra y siempre hizo más que cualquier otro jugador en el campo", dijo un compañero de equipo a CBS Colorado en el lugar. "No es justo que disparen a los niños en la escuela... En un lugar donde se supone que estamos aprendiendo, tenemos que preocuparnos por morir".

El viernes 3 de marzo, estudiantes de todo Colorado se unieron a los estudiantes de Denver East cuando salieron de clase hacia el edificio del Capitolio del Estado de Colorado para exigir a los legisladores que hagan más para frenar la violencia armada en el estado. 

"El control del arma no debe ser una edición partisana, él debe ser bipartisan. Ambos lados del pasillo deben estar buscando poner fin a la violencia armada para poner fin a las muertes de personas inocentes", dijo Grant Cramer, un estudiante que asistió a la marcha, a CBS Colorado.

A nivel nacional, el presidente Joe Biden ha promocionado su Ley Bipartidista para Comunidades más Seguras como el primer gran paso legislativo contra la violencia armada en más de dos décadas. Sin embargo, se ha debatido si el proyecto de ley habría detenido realmente el tiroteo masivo de Uvalde que impulsó su aprobación - probablemente no.

Para echar más leña al fuego, desde principios de 2023, Estados Unidos ya ha superado los 100 tiroteos masivos. El más reciente ocurrió el domingo 5 de marzo, cuando cinco personas resultaron heridas en un tiroteo en la playa de San Pedro, en California.