Arizona y Nueva Jersey acaban de convertirse en el decimosegundo y decimotercero estados en aprobar el uso recreativo de la marihuana a partir de los 21 años. La proposición 207 ha sido aprobada electoralmente hoy en Arizona con un millón y medio de apoyos, un 59,72% de los votos, mientras que en Nueva Jersey la Pregunta Pública 1 ha logrado un resultado todavía mayor, con el 66,94% de votos a favor.

Oregón ha adelantado al resto convirtiéndose en el primer estado en aprobar la descriminalización de la posesión de varias drogas ilegales: cocaína, heroína, oxycodona y la metanfetamina. Eso implica que la posesión será considerada un delito leve, parecido a las infracciones de tráfico, y la cara más importante de tal reforma, que tira hacia delante con un 58,61% de los votos, es que las multas servirán para financiar campañas y tratamientos de desintoxicación para los adictos. 

Los impuestos a la marihuana también deberán servir para financiar dichos esfuerzos médicos. Con un resultado similar, el 55.88%, Oregón también se convierte en el cuarto estado en despenalizar para uso terapéutico una amplia gama de psicodélicos derivados de psicobilicina y los hongos. Conviene remarcar que la producción y venta seguirán siendo ilegales, la reforma afecta solamente a la posesión de pequeñas cantidades.

Todavía a la espera de los resultados en Misisipi, Dakota del Sur y Montana, podrían respectivamente convertirse hasta en el decimoquinto estado en permitir el comercio de cannabis. 

Con un 57% escrutado, de momento Montana es todavía duda, con un 56.84% de los votos a favor.  Dakota del Sur también ha acelerado los procesos, convirtiéndose en el primero en pasar de la prohibición a la venta recreativa directamente a través de la Enmienda Constitucional A, que por el momento tiene un 53.41% de los votos a favor con un 85% escrutado, que permitirá la posesión de hasta tres onzas. 

Misisipi partía de una base distinta en la que ofrecía a sus habitantes dos opciones e incluso permitía votar ambas: la iniciativa 65 que contempla hasta veinticinco casos médicos y la iniciativa 65A, mucho más restrictiva y pensada solo para pacientes terminales. Finalmente parece que ha triunfado la opción 65 con un 74% de los votos, frente a la 65A con un 68%.

Si en 2018 Colorado recolectó unos 270 millones de dolares en impuestos a la marihuana, cinco veces más de lo que lograrón con el alchohol -45 millones-, son de esperar similares resultados en Nueva Jersey, que también presionará así a las vecinas Nueva York y Pensilvania. En Arizona, MjBizDaily proyecta un total de más de 760 millones en impuestos para el año 2024.

Latinoamérica y Europa observan con atención como poco a poco se van materializando las nuevas directrices de Estados Unidos en su guerra contra las drogas. Tras décadas siendo el baluarte de una acérrima táctica basada en la criminalización, que ha servido para subvencionar y dirigir departamentos y carteras por todo el territorio, parece que ahora las nuevas administraciones se ven seducidas por las ganancias económicas que la legalización de la marihuana les puede proporcionar.

Sorprende pues a los ciudadanos de muchos otros países este cambio de intereses, especialmente por lo que supuso durante años para pequeños grupos marginalizados que vieron condenados y emprisionados a algunos de sus miembros por economías de subsistencia basadas en el mercado negro. Ahora, todo aquel parapeto moral de las guerras contra el narcotráfico se disuelve lentamente en los mismos principios de oferta y demanda que lo vieran nacer.

Seguiremos informando conforme acabe el recuento de tan decisivas elecciones pero, por el momento, parece que la marihuana es la única gran ganadora.