La Nación Navajo había estado luchando contra el coronavirus durante meses antes de que gran parte de los Estados Unidos experimentara lo malo que podía llegar a ser.

A pesar de los desiertos de comida, las instalaciones sanitarias inadecuadas, la falta de agua corriente universal y la insuficiencia de recursos en su conjunto, la Nación Navajo se está recuperando, con un cambio que los estados más grandes y mejor equipados no han podido imitar. 

En un momento dado, tuvo la tasa de infección per cápita más alta de los Estados Unidos, con más muertes que los múltiples estados combinados.

Hasta ahora se han notificado unas 530 muertes, y el número total de casos ronda los 10.000.

Desde que la atención de los medios de comunicación ha desaparecido, la nación soberana ha estado haciendo avances positivos de los que otros estados desearían poder presumir. 

A mediados de junio, la Nación Navajo informaba de al menos 100 casos al día, pero por primera vez desde principios de marzo, no ha informado de nuevos casos de COVID-19.

El hito, dijo la gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, se debe a los esfuerzos de aquellos en la Nación Navajo, "que han trabajado incansablemente para proteger a sus comunidades y frenar la propagación de COVID-19".

"Sigue con el gran trabajo. Juntos, seguiremos superando esto", escribió Lujan Grisam.

Mientras que una gran parte de la Nación Navajo se encuentra en Nuevo México, el estado de Lujan Grisham también ha hecho progresos bajo su liderazgo. 

No anunció ninguna muerte adicional de COVID-19 el martes, con sólo 44 nuevos casos.

"Sigue así, Nuevo México", escribió la gobernadora en Twitter.

En gran medida, se reduce al liderazgo de la Nación Navajo durante este tiempo. Incluía un toque de queda inquebrantable, cierres de fin de semana y un lento plan de reapertura.

"La Nación Navajo no tuvo ningún caso nuevo de COVID-19 el martes, pero seguimos instando a todos a que lleven sus máscaras. El requisito de la Nación Navajo de usar máscaras sigue vigente a través de la orden de salud pública emitida el 17 de abril. Mantengan la guardia en alto y sigan luchando juntos contra COVID-19", escribió el presidente de la Nación Navajo, Jonathan Nez.

El toque de queda diario se mantiene en vigor de 9 p.m. a 5 a.m. y se espera que los cierres parciales de fin de semana continúen hasta septiembre. 

Puede parecer excesivo para algunos, pero era necesario para que la Nación Navajo contuviera la propagación, y lo ha logrado. Los Estados Unidos deben tomar nota de su liderazgo.