Mientras se acababa el fin de semana, aún se podía sentir esa calma y solidaridad típica de una tarde de sábado. A las afueras de la sede central de la Librería Gratuita de Filadelfia, una protesta pacífica se llevaba a cabo, con quizás unas 100 personas – de acuerdo a CBS Philly – que coreaban una canción que llevaba por título “I Can’t Keep Quiet”.

“Esta acción es (no tan) espontánea, para interpretar una canción titulada ‘No puedo quedarme callada’, de un artista llamado MILCK”, dijo una de las organizadoras, Beth Finn a CBS Philly. La reunión fue satélite de otras que se sucedían simultáneamente en el país durante la misma jornada.

Finn dijo que un vídeo de los cantantes interpretando la canción en la Marcha de las Mujeres en Washington se transformó en viral en los medios, y la convirtió en un himno para las mujeres.

“Con todas las cosas que suceden en el mundo hoy en día, las personas no están contentas y, especialmente en nuestro país, no debemos seguir calladas”, continuó Finn. “Estamos aquí, tenemos una voz que debe ser escuchada y nos encargaremos de que así sea”.