Hoy es el Día de la Igualdad Salarial para las Latinas, el día que marca el tiempo que tardan las mujeres latinas de todo el país en cobrar la misma cantidad que un hombre blanco en un solo año; la latina media gana 49 centavos por cada dólar que gana un hombre blanco.

Este año, el día ha caído el 8 de diciembre, marcando los dos años que las mujeres latinas necesitan trabajar para igualar justo lo que ganan sus compañeros.

LeAnn Chaparro es reclutadora sénior en LinkedIn y, como latina y responsable de contratación, ha estado en ambos extremos de la cuestión de la igualdad salarial. Recientemente habló con AL DÍA para dar consejos sobre cómo las latinas pueden conseguir el salario justo y equitativo que merecen.

"Hubo una época en mi carrera en la que no me di cuenta... de que llegaba antes [y] me quedaba más tarde. Hubo un tiempo en mi carrera en el que recuerdo haber ocultado el hecho de que era madre y escondido algunas de las luchas diarias que estaba teniendo", explicó Chaparro.

"Hubo un momento en mi carrera en el que recuerdo estar muy agradecida por un ascenso y descubrir que mi predecesor cobraba más que yo. Hizo falta mucho valor y mucha investigación para sacar el tema y pedir que se demostrara que mi salario era igual al de mi predecesor".

El conocimiento es poder

Para defender la igualdad salarial, lo mejor es ir preparado, dice Chaparro. Recopilando información relevante para tu puesto de trabajo, ya sea el que solicitas o el que tienes actualmente, puedes argumentar mejor a favor de aumentar tu salario.

Buscar en Internet títulos similares en sectores parecidos puede dar una estimación de lo que se puede esperar al solicitar un trabajo, lo que da un marco de referencia para hablar del posible salario.

Los jefes de contratación son otro recurso disponible para proporcionar información sobre el salario, las responsabilidades y las prestaciones del puesto que ofrecen, y pueden dar detalles sobre información que podría estar ausente en la descripción del puesto.

Si ya tiene un trabajo y sospecha que puede estar mal pagado, hablar de su salario con otros empleados es una forma eficaz de determinar si le pagan menos.

Una vez reunida suficiente información y en condiciones de argumentar que se le paga mal, es importante elegir el momento adecuado para exponer su caso, como durante una revisión a mitad o final de año, o cuando crea que tiene más posibilidades de persuadir a su jefe para que haga un cambio.

El proceso de negociación puede ser difícil, por lo que Chaparro recomienda dos soluciones: practicar de antemano la negociación de tu aumento salarial o buscar recursos online que te enseñen a negociar tu salario, como el curso de LinkedIn sobre Negociación Salarial.

Cómo tratar con los responsables de contratación

"Es importante que utilicemos un lenguaje directo", explica Chaparro. "Desde la perspectiva de un reclutador, siempre aprecio cuando alguien acude a una llamada o a una entrevista [y me] hace saber lo que quiere, lo que necesita. Eso me da algo con lo que trabajar".

Hacer preguntas sobre el rango salarial, los beneficios del puesto y las funciones y responsabilidades es una forma directa de obtener información sobre el puesto. Dependiendo de la investigación previa, esto puede dar una respuesta directa a si el puesto te pagaría mal o no.

Las preguntas deben centrarse en aspectos del trabajo, aunque algunos jefes de contratación pueden sentirse incómodos hablando de cifras o no saber cómo responder. Entre las posibles preguntas se incluyen:

• ¿Cuál es el rango salarial?
• ¿Cuáles son las funciones y responsabilidades? 
• ¿Cuál es el paquete retributivo? 
• ¿Qué beneficios adicionales conlleva el puesto?

"Lo realmente importante es que preguntes tanto por la banda salarial como por el paquete retributivo global. Eso indicará a la otra persona que te interesa saber un poco más sobre el puesto más allá del salario".

Por otro lado, los jefes de contratación pueden hacer mucho para ayudar a las latinas a conseguir la igualdad salarial.

Entre las medidas que se pueden tomar se encuentran incluir rangos salariales en las ofertas de empleo y mantener la transparencia sobre cuáles son las responsabilidades y los beneficios del puesto.

Otras medidas incluyen analizar el salario que reciben los no latinos y asegurarse de que los latinos reciben, dólar por dólar, el mismo salario que sus compañeros, y ponerse en contacto con Recursos Humanos, socios financieros y socios de compensación para garantizar la igualdad salarial para las latinas.

Trabajar juntos

El tema de las latinas mal pagadas no es nuevo. Muchos expertos están buscando formas de cerrar la brecha salarial y pueden estar dispuestos a educarte más sobre el tema y cómo manejarlo.

Los grupos de recursos para empleados (ERG), las asociaciones, los grupos comunitarios y otras organizaciones pueden ponerte en contacto con estos expertos, pero también pueden ayudarte a hacer crecer tu red profesional, obtener información y recursos, y comunicarte con otras latinas en situaciones similares.

Una forma de hacerlo es a través de LinkedIn, que proporciona conexiones con estas organizaciones y estos expertos, junto con eventos virtuales en directo que pueden utilizarse para establecer contactos con otros profesionales, mentores y patrocinadores.

Estar en conexión con otras latinas en situaciones similares o con aquellas que tienen experiencia en el manejo de estar mal pagadas permite compartir información y actuar conjuntamente, en lugar de simplemente abordar la brecha salarial en solitario.