“I

ndocumentados”. 

“11 millones de indocumentados”.

Es una suerte de sonsonete que cualquiera que consuma medios de comunicación estadounidenses tiene que soportar todo el año.

Durante los últimos diez años, o más, los “11 millones de indocumentados” han sido como un titular que no cambia: la estadística más citada sobre los latinos en Estados Unidos.

No se cuestiona ni tampoco se comprueba (¿cómo se pueden contar con exactitud si son indocumentados, y por tanto no se pueden contabilizar?). Sin embargo, es una cifra odiosa que define a través de la repetición cómo millones de estadounidenses dimensionan su visión más común de la presencia latina en Estados Unidos. 

No tenemos ni idea de que el PIB de los estadounidenses de ascendencia latina se ha disparado hasta los $2,6 billones de dólares, lo que ha impulsado la productividad de la economía estadounidense, que de otro modo estaría en una crisis mayor.

Sin embargo, podemos recitar de memoria el número de personas que el Libro de Estilo de Associated Press (AP) seguía tildando hasta no hace mucho de “ilegales”, tras una retractación en 2013 del término al reconocer finalmente que “no” era “preciso.”

AP, los principales canales de noticias de Estados Unidos y el periodismo en Estados Unidos, en general, tienen un largo camino por recorrer para añadir más “precisión” a la hora de documentar la realidad de los Estados Unidos de hoy.

AP, los principales canales de noticias de Estados Unidos y el periodismo en Estados Unidos, en general, tienen un largo camino por recorrer para añadir más “precisión” a la hora de documentar la realidad de los Estados Unidos de hoy.

Suelo decir que la realidad de la sociedad estadounidense, que evoluciona rápidamente, va muy por delante de la capacidad actual de los medios de comunicación para reflejarla con precisión, lo que constituye la principal responsabilidad del 4º Estado de nuestra sociedad democrática.

Esa fue nuestra inspiración para el Laboratorio de Periodismo de AL DÍA sobre la Educación Superior, un proyecto que hemos creado en colaboración con la LMA (Asociación de Medios de Comunicación Locales), la asociación nacional de medios de comunicación que lidera el proyecto nacional de periodismo con AL DÍA y otras 15 organizaciones de medios de comunicación diversos de todo el país que buscan el apoyo de instituciones filantrópicas.

A través de reportería independiente y basada en hechos reales, queremos “documentar a los verdaderos indocumentados”, otros 3,6 millones de latinos, 93% de ellos ciudadanos de los Estados Unidos de los que aún no tenemos noticia porque nadie ha escrito sobre ellos.

Hoy ellos son una bendición para el sistema de educación superior de Estados Unidos y para la economía nacional vinculada a él. Se abrieron camino para llegar a los campuses universitarios, y están estudiando con disciplina en la universidades del país, compensando activamente por la pérdida de más de 2 millones de nuevos estudiantes que han sufrido las universidades de todo el país en los últimos tres años.

La COVID-19 ha profundizado esta deserción de estudiantes regulares, aumentado la posibilidad de una crisis laboral que agravaría la actual escasez de mano de obra profesional suficiente, competente y diversa que experimentan hoy todas y cada una de las empresas de la lista Fortune 1000 de Estados Unidos.

Estados Unidos será más vulnerable a la fuerte competencia que nos llega del extranjero si no reconocemos el precipicio demográfico al que nos enfrentamos en la coyuntura crítica del sistema de educación superior estadounidense.

El Laboratorio de Periodismo de AL DIA sobre la Educación Superior —un proyecto serio de reportería y redacción de 3 años de duración, impulsado por un equipo de 4 periodistas profesionales— quiere contribuir, utilizando un enfoque de periodismo de soluciones a este propósito común, al cambio estructural que como sociedad no podemos permitirnos seguir ignorando.