La tradicional “Cabalgata de Reyes” ha hecho su paso este miércoles por las ciudades de España, y ha vuelto a poner sobre la mesa el racismo normalizado que existe en la sociedad. Y es que en muchas ciudades de España, se continúa celebrando esta tradición incluyendo una práctica anacrónica y racista, el “blackface”.

El “Blackface” es una práctica que tiene su origen en el “minstrel”, un género teatral y musical de finales del siglo XX en el que personas blancas se pintaban el rostro y las manos de negro para representar a las personas negras esclavizadas, ridiculizándolas.

Muchos colectivos y activistas antirracistas vienen advirtiendo sobre lo normalizado de esta práctica que, bajo la categoría de “tradición”, tiene mucha permisividad ante el evidente racismo que implica.

Serigne Mbaye, diputado de Podemos en la Asamblea de Madrid y ex portavoz del Sindicato de Manteros de Madrid, ha criticado duramente que en diferentes partes del país todavía muchas  personas blancas se disfracen del rey Baltasar con motivo de la Cabalgata de los Reyes Magos.

Mbaye se ha sumado, como otros años, a una campaña propuesta por el colectivo y plataforma antirracista Afroféminas, dejando en claro la importancia de combatir el racismo normalizado y de trabajar por una representación real y respetuosa de las diferentes comunidades. “A ver si lo entendemos. A favor de Baltasar, un Baltasar Real. Ninguna necesidad de pintarse para intentar ridiculizar”. 

Así como la cultura de un pueblo está viva, y se construye desde la práctica, es posible mantener una tradición sin necesidad de que esta refleje el momento histórico en el que se creó, sino adaptándola a los cambios y aprendizajes que tenemos como sociedad.