Según la leyenda mexicana, Malinche, conocida también como Malinalli [del náhuatl Malintzin ‘hierba’] o Doña Marina, fue una de las 19 mujeres esclavas dadas como tributo a los españoles por los indígenas de Tabasco tras la batalla de Centla, una de las batallas clave para la conquista de México. Malinche se convirtió en intérprete, consejera e intermediaria de Hernán Cortés, con quien tuvo su primer hijo, Martín, considerado uno de los primeros mestizos surgidos de la conquista de México. 

De ahí que Malinche se haya convertido con el tiempo en una figura mítica del imaginario mexicano: pero mientras algunos la consideran la “madre” simbólica de la nueva nación mestiza que hoy es México, otros la consideran “traidora”, por haber tenido un hijo con el conquistador, o “heroína víctima”, por haber sido esclavizada. 

Ahora, una exposición histórica en el Museo de Arte de Denver (DAM) explora el complejo legado de la mujer y su impacto en la cultura artística a ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y México. 

"Es la primera vez que se realiza una exposición como ésta", explicó Terezita Romo, comisaria latina a cargo de la exposición, a  Artnet. 

"Incluso en México, la historia de La Malinche siempre se relaciona con Cortés, siempre se trata de la conquista. Esta exposición realmente deja de lado eso. Se trata más bien de esta joven adolescente indígena y de lo que hizo, no sólo para sobrevivir, sino para cambiar la historia". 

La exposición explora desde el rol de la Malinche como interlocutora entre los pueblos azteca y español, partiendo de la primera descripción escrita que hizo Cortés de ella:  "la lengua que yo tengo" , al de “madre del mestizaje” tras el fin de la revolución mexicana, como símbolo de una nueva raza mixta. 

En otra sección, la exposición explora el rol de la Malinche como "La Traidora", rol que representó durante gran parte del siglo XX: como una persona que dio la espalda a su pueblo, invitando a generaciones de limpieza étnica.  Fue durante esta época cuando se popularizó la palabra "malinchista" como término peyorativo para alguien que prefiere las culturas extranjeras a la propia. 

Uno de los objetivos de la exposición es invitar al visitante a reflexionar sobre esta visión insultante de la Malinche, basada en una  visión sexista y misógina de la influencia de una mujer, según los comisarios de la exposición. 

En respuesta a este periodo de denigración, La Malinche fue reivindicada como icono de los movimientos chicanos de los años 60 y 70. La exposición muestra algunas obras que muestran cómo su imagen ha sido adoptada por diferentes comunidades, desde feministas hasta activistas trans.

"Traidora, superviviente, icono: el legado de La Malinche",  reúne 68 obras de arte que estarán expuestas en el DAM hasta el 8 de mayo de 2022. La exposición viajará luego al Museo de Albuquerque y al Museo de Arte de San Antonio.