Martin Mobarak fue el responsable de quemar una de las páginas del diario de Frida Kahlo, valorada en 10 millones de dólares, para hacer un Token no fungible (NFT). Lo habría adquirido en 2015 a la galería neoyorquina Mary Anne Martin. 

El dibujo de Kahlo titulado “Fantasmones Siniestros” es una de las piezas de su diario, datado entre 1944 y 1954.

Mobarak dijo, durante el evento en el que destruyó la pieza en julio, que con las ventas del NFT iba a realizar donaciones a diversas fundaciones previamente elegidas.

Con su iniciativa web Frida.NFT, el hombre busca la transformación digital y que el arte de Kahlo “sea compartido alrededor del mundo” para crear donaciones que continuarán creciendo “en la eternidad”, informó el diario El País.

Luego de darse a conocer lo ocurrido con la histórica pieza de arte, la Secretaría de Cultura de México aseguró que no recibirán ninguna donación y que investigarán a detalle lo sucedido.

El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) informó que ni el Palacio de Bellas Artes, ni el Museo del Palacio recibirán donación alguna por parte del coleccionista y empresario, como se ha difundido públicamente.

También, el INBAL informó que hasta el momento no ha recibido solicitud y no ha emitido autorización de reproducción sobre la obra referida.

A pesar que Mobarak hizo ese acto para destinar las ganancias a causas caritativas relacionadas con niños y niñas, el INBAL mencionó que en México la destrucción deliberada de un monumento artístico constituye un delito en términos de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos.