La actiz y activista Jane Fonda asumió la causa de las trabajadoras domésticas y campensinas que están exigiendo al Congreso, como en el caso de los movimientos #MeToo y #TimesUp, que aprueben reformas a la ley que puedan combatir el acoso sexual y la explotación.

Algunas de las exigencias de estas mujeres incluyen la protección contra la discriminación y el acoso, la expansión y actualización de los derechos de las trabajadoras del campo y la redacción de un proyecto de ley que reconozca el trabajo doméstico.

Fonda visitó el Capitolio el martes para un foro organizado por el grupo Unstoppable Women Workers (Mujeres Trabajadoras Imparables).

"Nunca pensé que viviría para ver el día en el que las mujeres serían escuchadas. Ahora soy muy consciente del hecho de que el principio de todo esto tiene que ver con que las mujeres que primero hablaron son blancas y famosas", dijo Fonda.

Había comenzado su discurso diciendo "Buenos días", usando directamente el español, pues muchas de estas mujeres a las que ahora apoya "son también mujeres de color y con frecuencia inmigrantes".

"Son muy vulnerables y trabajan de forma muy aislada; sus voces no son escuchadas", añadió.

La actriz, de 80 años, continuó su discurso diciendo que ella y las otras celebridades son "como antenas repetidoras, ¿saben?, como esas torres en las cumbres de las montañas que recogen las señales del valle y la expanden a un espectro mayor".

Fonda dijo que ella y otras mujeres de Hollywood destacadas tuvieron esta revelación. " Si de verdad vamos a confrontar y solucionar estos asuntos de los derechos de las trabajadoras y su dignidad y protección del acoso sexual en los lugares de trabajo, tendremos que establecernos en afinidad, amor y alianza con todas nuestras hermanas de todos los sectores"

Monica Ramirez, cofundadora de la Alianza Nacional de Campesinas, dijo, por su parte, que las trabajadoras del campo han sentido "el apoyo de la gente de la industria del entretenimiento". El grupo de Ramírez y la National Domestic Workers Alliance (Alianza Nacional de Trabajadoras Domésticas) están en Washington DC para reunirse con senadores y congresistas para pedirles que presenten un proyecto de ley que garantice una mayor protección para las trabajadoras en ambos sectores, generalmente ignoradas por los medios y la opinión pública.