El origen de esta celebración no tiene una versión oficial, sin embargo, la más conocida se remonta a 1565, cuándo el rey Carlos IX hizo que se cambiaran las fechas de celebración del Año Nuevo luego de adaptarse al calendario Gregoriano. 

Antes de la petición del rey Carlos, el Año Nuevo era celebrado el 1 de abril, luego de iniciada la primavera, pero con el cambio al calendario Gregoriano el inicio de año se pasó al 1 de enero, como se celebra hasta hoy en día. 

Debido al cambio de fecha tan brusco muchas personas tardaron en enterarse de este hecho y siguieron festejando el 1 de abril como el inicio del año nuevo, trayendo consigo burlas de quienes sí se habían dado por enterados del cambio en la fecha. 

Cómo broma a las personas que celebraron el 1 de abril, los demás ciudadanos les enviaban un trozo de papel con forma de pescado para pegarlos en su espalda y este hábito de bromear unos con otros se mantuvo durante décadas en Francia, Gran Bretaña y Escocia, quienes a su vez lo transmitieron a las colonias americanas.

En la actualidad, este día se sigue celebrando con bromas entre las personas, algunas en persona y otras a través de redes sociales, por lo que hay que ser muy cuidadoso con lo que se percibe en esta fecha.