LIVE STREAMING
El activista de derechos humanos cubano Pedro Fuentes (c) habla durante una rueda de prensa, en el restaurante Versailles, en Miami, Florida (Estados Unidos). Junto a Fuentes participan Ramón Saúl Sánchez (i), Martin Palouf (2i), Pedro Peñaranda (2d) y…

[OP-ED]: Un Año Nuevo de Resistencia y Esperanza

Felices fiestas y un año nuevo de paz y prosperidad para mis lectores y todos los seguidores de Al Día News.

SHARE THIS CONTENT:

Felices fiestas y un año nuevo de paz y prosperidad para mis lectores y todos los seguidores de Al Día News.

No hay nada sorprendente, por supuesto, acerca de estos deseos que no son otros que los que tradicionalmente se expresan año tras año. Pero a riesgo de criar fama de aguafiestas, debo confesar que esta vez siento que no son nada más que palabras vacías, la repetición mecánica de un ritual anual que, tras la elección Donald Trump, significa muy poco.

Justo a tiempo para las fiestas de fin de año, el Presidente electo emitió este twit que parece señalar el regreso de la carrera armamentista y con ella, la guerra fría:

 “Los Estados Unidos tienen que fortalecer y ampliar grandemente su capacidad nuclear hasta el momento en que el mundo entre en razón en cuanto a las armas nucleares”.

Un alarde de machismo preocupante porque puede afectar nada menos que el futuro de la humanidad. Sin duda, no es como para celebrar.

Para los cubanos, la temporada tampoco es alegre. Después de todo, Trump ha amenazado con echar atrás las relaciones diplomáticas y volver a la irracionalidad y hostilidad sin sentido que pasaba como una política hacia Cuba hasta hace dos años.

 “Si Cuba no está dispuesta a hacer un trato mejor para el pueblo de Cuba, el pueblo cubanoamericano y los EE.UU. le pondré fin al trato”, Trump afirmó en un twit.

Lo que nadie sabe es qué quiere decir el multimillonario negociante con “un trato mejor”.

Unos meses atrás, Trump también les dijo lo siguiente a un grupo de cubanos en Miami: “Todas las concesiones que Barack Obama le ha concedido al régimen de Castro fueron hechas mediante órdenes ejecutivas, lo cual quiere decir que el próximo Presidente puede revertirlas.

 “Y eso es lo que haré a menos que el régimen de Castro acceda a nuestras demandas. Esas demandas son libertad política y religiosa para el pueblo cubano. Y la liberación de los presos políticos”, añadió Trump en una nueva muestra de su ignorancia. Después de casi 60 años de implacable enemistad, uno esperaría que el nuevo Presidente hubiera aprendido que La Habana no reacciona bien a las amenazas.

Aún más revelador sobre sus planes para Cuba y su increíble falta de conocimientos, es el grupo de dinosaurios cubanoamericanos que ha escogido como parte de su equipo de transición.

Vergonzosamente, todos, desde Mauricio Claver Carone, Yleem Poblete, John Barsa, Mercedes Shlaap hasta el académico Carlos E. Díaz Rosillo apoyan que se mantenga el embargo y se elimine la nueva política de Obama.

Igualmente vergonzoso --y completamente predecible-- es el apoyo de los fosilizados miembros cubanoamericanos del Congreso a echar atrás las medidas implementadas por Obama. Ileana Ros-Lehtinen, Mario Díaz-Balart, el inefable Marco Rubio y Bob Menéndez le han pedido a su nuevo jefe con gran entusiasmo que haga más difícil la vida de ese pueblo cubano que hipócritamente ellos afirman querer ayudar.

Sí, no hay muchos motivos de celebración dado que todo apunta a un futuro inmediato ausente de prosperidad y de paz bajo el régimen fascistoide de Donald Trump y su siniestra banda de generales, plutócratas y trogloditas.

Es por eso que les deseo a todos un 2017 de resistencia y esperanza.

 

 

 

 

 

 

TAGS