Como un verdadero retroceso en la defensa de los derechos civiles fue calificada la orden que este tribunal tomó hace más de un año, una postura política con tintes religiosos que va en contra de la libertad que tiene cada mujer de decidir.

Sin importar que el derecho al aborto en todo Estados Unidos era considerado como constitucional, la Corte Suprema continúa perpetuando un inoficioso debate alrededor de una decisión tan personal como esta, promoviendo un mensaje distorsionado de estos eventos.

El decir que una mujer cuenta con la potestad de decidir sobre su propio cuerpo no equivale a enviar un mensaje para convertir la práctica en un asunto cotidiano. Si bien Roe v. Wade ha hecho más difícil el acceso a centros médicos que ofrezcan estos servicios de manera legal, esto no significa que el número de abortos hayan disminuido, pues varias mujeres han viajado a otros estados, e incluso a otros países, para realizar el procedimiento, esto sin contar a las que han acudido a operaciones clandestinas.

"Por mi seguridad y por mi capacidad de tratar a mis pacientes, supe en cuanto Idaho empezó a aprobar leyes que penalizaban el transporte a través de las fronteras estatales y todo ese tipo de cosas que no sería un lugar hospitalario para que yo ejerciera la medicina. Y eso es algo desgarrador, ¿verdad?", dijo a CNN una médica residente que huyó del estado y que pidió no utilizar su nombre completo por motivos de seguridad.

Y así comienza la cacería de brujas que debería avergonzar a cualquier nación que pretenda llamarse libre y democrática. Medidas estatales que rayan con el fascismo, donde por ejemplo los proveedores de atención médica tuvieron que demandar al fiscal general del estado después de que éste escribiera en un dictamen jurídico que Idaho prohíbe a los proveedores médicos derivar a pacientes fuera de su territorio para que reciban estos servicios.

Permitir que estas decisiones sean tomadas por autoridades estatales, que se rigen por los intereses políticos de quienes se disputan el poder, es poner en una subasta, bajo el control de comerciantes de libertades y derechos, una decisión que únicamente debe estar bajo el control de quien pone su integridad física y emocional en juego con este procedimiento.

Alabama, Arkansas, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Idaho, Kentucky, Luisiana, Mississipi, Misuri, Oklahoma, Tennessee, Texas, Virginia Occidental y Wisconsin son los 14 estados donde el aborto está prohibido en todos los casos o con escasas excepciones. Por lo pronto, las elecciones del próximo año indicarán si este número crece penosamente o, por lo contrario, se reduce.