Me topé con un pequeño libro de pasta blanda durante mi último viaje a latinoamérica, y esto es lo que descubrí: un joven profesor profesor universitario que se retiró y fundó su propia empresa, ‘Invertir’, que es su propia firma de inversión creada después de haber sido un ingeniero financiero en corporaciones mayores en latinoamérica, tras completar varios grados universitarios, el primero de ellos del London School of Economics, Birkbeck College, también en Inglaterra, más cursos adicionales en el Arte de Negociar en Harvard University.

Su libro previo , ‘Hábitos de los ricos’; nuestras propias ideas para alcanzar libertad financiera’,  se convirtió en un best-seller en latinoamérica, donde el libro fue originalmente publicado en español, la lengua nativa del autor.

Credenciales impecables, pero una forma muy simplificada y auténtica de echarle una mirada a la vida.

El señor Gómez Gómez, no duda en exclamar que “el presente siglo es un siglo de impostores, de modernas verdades a medias propuestas vía ambigüedades complicadas por un nuevo grupo de líderes para aquellos que ‘tragan en entero’. Estos nuevos ‘líderes’ están nuevamente explicando los aspectos más fundamentales de nuestra condición humana, el futuro de la comunidad latina en los Estados Unidos y el porvenir de la nación americana en el siglo XXI.

“Hoy, más que nunca, nada es más importante que ser uno mismo".

Citando al filósofo y escritor español Miguel de Unanamo, el dice que si uno no habla de uno  mismo, la única criatura que conocemos y tal vez amanos, para qué tomarse la molestia de hablar de los demás, absolutos extraños por quienes no podemos hacer más que perdón por ser ‘hombres y mujeres masa’, en la definición de Ortega y Gasset, carentes de sensibilidad y hasta de buenas maneras.

“Que no te limiten los retos, sino que tú retes a tus límites,” dice el señor Gómez Gómez.

Hay poder en la voces jóvenes de latinoamérica aún por ser conocidas en las partes anglo parlantes del continente, mucho más suertuda, y que se explaya hacia el norte, en la segunda mitad del continente.