"Los agentes de la Patrulla Fronteriza no pueden hacer su trabajo adecuadamente en la frontera debido a las ridículas leyes liberales (demócratas) como Catch & Release. Se están volviendo más peligrosos. Están llegando las caravanas. Los republicanos deben adoptar la opción nuclear para aprobar leyes estrictas AHORA. ¡NO MÁS PACTOS CON DACA! " Trump tuiteó el domingo. Se estaba refiriendo al programa creado por Barack Obama que protege a unos 800.000 inmigrantes indocumentados traídos a los Estados Unidos cuando eran niños. Trump acababa de asistir a la iglesia con Melania, su esposa inmigrante y había enviado un tuit de "Felices Pascuas".

Aunque parezca mentira, hay personas que dicen haberse sorprendido por la lluvia de tuits de Trump y por su desprecio por el destino de cientos de miles de jóvenes que, con excepción de la falta de "papeles", son mejores estadounidenses que el presidente mismo. Sin embargo, los miembros de United We Dream (UWD), el grupo más grande de Dreamers en el país, acostumbrados como están a los múltiples intentos de Trump de utilizarlos como peones para que el Congreso financie su absurdo muro fronterizo, no se sorprendieron en lo más mínimo.

"Esto solo reafirma lo que hemos sabido desde el principio: Trump nunca quiso proteger a la juventud inmigrante; solo quería promover su odiosa agenda antiinmigrante", escribió el grupo de jóvenes en Twitter como respuesta.

El tuit de UWD dio en el blanco. El odio racista, no una verdadera preocupación –aunque fuera errada– por la seguridad de la nación, es lo que realmente alimenta las rabietas peligrosas del anciano ocupante de la Casa Blanca.

Como si quisiera disipar cualquier duda sobre la profundidad de su ignorancia, Trump agregó en otro tuit: "Estos grandes flujos de personas están tratando de sacar provecho de DACA. ¡Quieren participar en el acta!" aparentemente reaccionando a un informe de Fox News, su gurú político, sobre una caravana de centroamericanos que huyen de la pobreza y la violencia y que atraviesa México con la esperanza de llegar a la frontera con Estados Unidos y solicitar ser considerados refugiados.

Uno esperaría que el presidente del país al menos comprendiera que la llamada caravana no tiene absolutamente nada que ver con DACA. Trump no lo entiende, a menos que estuviera mintiendo una vez más para crear confusión y justificar su insensible abandono de los beneficiarios de DACA.

Como informó Yamily Habib en Al Día News, “Trump ha advertido que muchas personas están viniendo porque quieren aprovecharse de DACA’, según reportó la BBC, lo que ha sido ampliamente rebatido por políticos, analistas y periodistas, pues el programa de Acción Diferida creado por Barack Obama planteaba proteger a inmigrantes ‘que hayan vivido en Estados Unidos desde el 2007, que hayan llegado antes de cumplir 16 años y que tuvieran menos de 31 el día 15 de junio del 2012’, según explicó el Washington Post. Cualquier persona que haya llegado después no califica para la protección del programa”.

Ni un solo participante de la "caravana", incluso si llegan a la frontera, calificaría para DACA, un programa que Trump, no los demócratas, terminó en septiembre de 2017.

Este insolente payaso es presidente de los Estados Unidos, pero tiene que ser puesto en su sitio para que no pueda seguir haciendo estragos en la nación a la que pomposamente prometió "volver a hacer grande otra vez".

Faltan seis meses para las elecciones de mitad de período, y ahora es el momento de inscribirse para votar y hacer que los demás tomen conciencia de su deber de hacerlo. Podemos comenzar a devolver a Washington algo de la cordura –nunca muy abundante– que Trump y sus cómplices republicanos han eliminado.

En cuanto a los Soñadores, algo es cierto: ellos y ellas saben luchar por su causa. Y ganarán con el apoyo de todos los estadounidenses decentes.