LIVE STREAMING
Foto: Steve Gonzales | Credit: AP
Foto: Steve Gonzales | Credit: AP

El asesinato de Vanessa Guillén es una nueva ventana a la cultura de abuso sexual en el ejército de EE.UU.

Entre 2016 y 2018, las demandas por asalto sexual aumentaron casi un 40% en las fuerzas armadas estadounidenses.

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Dónde está la plata?

Sobrerreacción en las bolsas

¡La FED lo vuelve a hacer!

¡Deportaciones masivas!

El misterio de los drones

¿Dinero más barato?

¿Listos para la deportación?

La alarma de los drones

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Es imperativo buscar un cambio en el ejército para las mujeres. Meses después de la desaparición de Vanessa Guillén, sus restos fueron encontrados e identificados. 

Su agresor se suicidó después de ser interrogado por el asesinato, y el ejército está tratando de limpiar sus manos de otro escollo en el ejército: el abuso sexual.

Mientras buscamos respuestas a la muerte de otra joven, es difícil negar los hechos de los militares y su larga historia de abuso sexual. 

En mayo, se publicó la hoja informativa sobre la violencia sexual en el ejército de los EE.UU. 

Según el informe anual, las demandas por agresión sexual aumentaron en un 3%. De 2016 a 2018, la tasa aumentó casi un 40%. 

De todas las mujeres que denunciaron su caso de agresión, el 59% también informó que su atacante era alguien de mayor rango. El 24% fue agredida por alguien dentro de su cadena de mando. 

En los informes, hay cartas públicas de presidentes y miembros de alto rango de la Cámara de Representantes de EE.UU. que explican su incapacidad para sacar conclusiones sobre el tema. 

"Por requerimiento del Congreso, el Departamento no realizó una encuesta de la fuerza activa y, por lo tanto, no tiene una estimación del número de asaltos sexuales que ocurrieron en el último año dentro del servicio activo. Por lo tanto, aunque el número de informes oficiales de agresiones sexuales recibidos por el Departamento aumentó un tres por ciento este año, no podemos caracterizar este aumento como una tendencia positiva o negativa", se lee en cuatro cartas publicadas por miembros de la Cámara de Representantes en el Comité de las Fuerzas Armadas.   

La primera frase del resumen ejecutivo publicado en abril de 2020, dice que el Departamento de Defensa "sigue abordando la agresión sexual de manera integral". 

Vanessa Guillén desapareció el 22 de abril de 2020. Desde que se encontraron sus restos la semana pasada, múltiples mujeres han hablado de sus experiencias en el ejército en Instagram.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

My name is Sadie Strong. This was me in 2012. I was 19 years old. I was born December 15th 1992 and that girl died on deployment to the Middle East after being raped by her command. I was lucky enough to physically still come back home, but I was forever changed. I cry when I look at these photos Becuase it’s someone so important to me and I lost her and everything she loved Becuase she wasn’t protected. Vanessa Guillens remains are more than likely just found. Her abuser killed him self when they went to arrest him. Her family was given NO Answers, no respect, no investigation. I didn’t report when I was gang raped by higher ups in my command. They took pictures of it and thought it was funny and even left them on my phone. When I brought it up one of them that I thought was my friend he said it was my fault because I drank with them. They shipped me off the next week to another base in Qatar Becuase they feared I would report them. They sent another person with me from their shop to “keep an eye on me”. A few weeks later he drugged me and raped me after work one day. I remembered it all but was unable to fight back. I reported it the VERY NEXT day. They took me to medical and did a rape kit. Turned out his ex fiancé broke things off when he deployed Becuase he raped her too and she was scared of him. They wouldn’t allow her to come to court. But they allowed him mulltiple friends as character witnesses. He’s a good ol boy. He didn’t rape me. They also “lost” all my medical documentation from the day after examination. I was laughed at and called a liar Yeah, I got lucky Becuase I’m still alive to tell the tale. Vanessa is not. The military is a huge problem for both sexual assault and harassment. And I don’t fucking now how to stress this enough anymore. It took a female soldier to fucking get murdered for this to get national attention. DO SOMETHING! Help me do something. Share my story. Share all of our stories. They need to be heard. No one gets justice until we all do. I’m not scared of them. I will NEVER stop. #iamvanessaguillen #findvanessaguillen #usnavy #military #sexualharassment#protectus#strongertogether#vanessaguillen#navy#army#helpus#change

A post shared by Sadie Strong (@sadieestrong) on

Aunque los militares afirman que "se esfuerzan" por promover una cultura libre de acoso sexual, la pregunta es ¿por qué no se han esforzado siempre por ello? 

Aunque estos informes se publican anualmente, no parece preocupar que las estadísticas muestren que el acoso sexual y el abuso sexual aumentan constantemente o que, quizás, se han comenzado a denunciar más que antes.