El jueves 10 de septiembre, una corte federal dijo que la orden de Trump de julio que buscaba excluir a los inmigrantes indocumentados del Censo viola la ley.

Durante el verano, el presidente trató de sacar a los inmigrantes indocumentados del censo en un memorándum que afirmaba que no debían ser contados con el propósito de decidir cuántos miembros del Congreso serían nombrados en cada estado. 

"El respeto a la ley y la protección de la integridad del proceso democrático justifican la exclusión de los extranjeros ilegales de la base de reparto, en la medida en que sea factible y en la máxima medida de la discreción del presidente bajo la ley", se lee en parte de la declaración de Trump.

A pesar del alboroto, su memorando de julio no cambió quiénes serían contados en el censo de 2020. 

En su lugar, se dirigió al Secretario de Comercio Wilbur Ross, quien tiene que proporcionar al presidente un recuento de toda la población, y un segundo recuento que habría excluido a los que eran inmigrantes indocumentados. 

Este último esfuerzo desesperado también vino después de que la administración de Trump trató y falló en preguntar el estado de la ciudadanía en el censo.

Sin embargo, gracias a los tribunales federales en ambas instancias, ese no será el caso. No sólo lo detuvieron, sino que también afirmaron que causaría hasta una década de daño si se aprobaba. 

"Declaramos que el Memorándum Presidencial es un ejercicio ilegal de la autoridad otorgada al Presidente por ley", el panel de tres jueces dictaminó unánimemente

Los jueces también dictaminaron que el memorándum de Trump violaba las leyes federales que establecen cómo se dividen y asignan los escaños del Congreso. El término político es "reparto", y es lo que se usa para decidir cuántos miembros de la Cámara de Representantes recibirá cada estado dependiendo de la población del mismo.

Incluso el duro plazo establecido por la administración podría cambiar en las próximas semanas. Durante el fin de semana del Día del Trabajo, un juez federal de California bloqueó su intento de reducir o alterar las operaciones de campo del censo, que se prevé que terminen a finales de septiembre...

Esta fue una muy buena noticia para aquellos que han lidiado con el censo durante todo el año en medio de una pandemia.

"Esta es una gran victoria para el derecho al voto y para los derechos de los inmigrantes. El presidente Trump ha intentado y fracasado una vez más en armar el censo contra las comunidades de inmigrantes", dijo Dale Ho, abogado de grupos no gubernamentales en la demanda de California. "La ley es clara - cada persona cuenta en el censo."