Quienes se habían preparado para la tormenta tropical Karen en la isla de Puerto Rico despertaron el lunes por la noche con una sacudida a causa de un terremoto de magnitud 6.3 cuyo epicentro estuvo a 49 millas al norte de la costa.

El terremoto inicial fue seguido por tres réplicas, que midieron 4.7, 4.6 y 4.6 respectivamente, y ha sido el sismo más fuerte en Puerto Rico registrado en los últimos años.

Kiara Hernández, portavoz de la Agencia de Manejo de Emergencias de la isla, dijo a The Associated Press que, a pesar de su magnitud, no hubo informes inmediatos de daños o riesgo de tsunami.

El Centro Nacional de Alerta de Tsunamis del Servicio Meteorológico del Pacífico confirmó en Twitter que no había amenaza de tsunami.

Puerto Rican Governor, Wanda Vázquez Garced, encouraged those shook by the temblor to remain calm. 

La gobernadora de San Juan, Wanda Vazquéz Garced, alentó a los sacudidos por el temblor a mantener la calma.

A pesar de que los informes oficiales no consideraron daños, David Begnaud, corresponsal de CBS News, tuiteó un video en Twitter de un corte de agua en Mayagüez, Puerto Rico, luego del terremoto.

La experiencia también sacudió a una población demasiado familiarizada con los desastres naturales en los últimos años.

Frecuentemente se registran mini terremotos en la isla casi todos los días, pero pasan desapercibidos. Es por ello que el sismo del día lunes tomó a todos por sorpresa.

El último terremoto de magnitud similar fue un 6,4 que ocurrió en 2014. No solo ocurrió a solo 17 millas de la costa y causó más daños, sino que se reportaron unas 70 réplicas, tres de más de 3.5 de magnitud.