El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) va a llevar a cabo una campaña de control de la inmigración este mes, dirigida a múltiples ciudades santuario en todo el país.

Empezarían en California, según el Washington Post, en la próxima semana. Tres funcionarios de EE.UU. con el ICE le dijeron al Post que tendrían como objetivo las llamadas "ciudades santuario" como San Francisco, Denver y Filadelfia.

Los dos funcionarios hablaron con el Post con la condición de mantener el anonimato, pero dejaron claro que los esfuerzos son parte del régimen de ley y orden de la Administración Trump, basado en la autoridad de aplicación de la ley, y la represión de la inmigración. 

Apuntar a las ciudades santuario, no sólo sirve para publicitar el cumplimiento de la promesa de su campaña sino que también ataca a las ciudades dirigidas por los demócratas, como las mencionadas anteriormente. 

La Administración justifica la medida culpando a esas ciudades de la violencia que se intensificó durante el verano tras los asesinatos de múltiples víctimas negras desarmadas.

Al traer al ICE a la escena, la Administración Trump cree imponer el orden. 

Los funcionarios han advertido a estas ciudades y jurisdicciones, que el ICE de hecho llevaría a cabo más redadas y arrestos si siguen adelante con las políticas de santuario.

Los funcionarios de estas ciudades y jurisdicciones dicen que sus políticas de "santuario" infunden la confianza de la comunidad en los barrios de inmigrantes, donde los funcionarios necesitan que los residentes informen sobre el crimen y sean complacientes con las autoridades locales sin miedo a la deportación.

En Filadelfia, por ejemplo, esto significa que los empleados de la ciudad, incluida la policía, no pueden preguntar sobre el estado de la documentación de las personas que conocen. Filadelfia tampoco provee a los oficiales de ICE o a los agentes de inmigración, de hecho, con información para las deportaciones.

Aun así, a la luz de las inminentes redadas, la necesidad de defensa legal gratuita y el aumento de la defensa de los inmigrantes está en su punto más alto.

Recientemente, el Proyecto de Unidad Familiar de los Inmigrantes de Pennsylvania (PAIFUP) recibió una subvención de la Iniciativa SAFE del Instituto de Justicia de Vera. Desde su formación en 2017, Vera ha ayudado a miles de inmigrantes en todo el país - 43% de los cuales han sido liberados de la detención y 35% han ganado su derecho a permanecer en el país.

Pero no hay suficientes recursos como este, especialmente con el ICE intensificando los esfuerzos sólo semanas antes de las elecciones generales. 

Incluso en 2018, la oficina de ICE en Filadelfia estaba haciendo más arrestos de inmigrantes sin condenas penales que en cualquier otro lugar de la nación.

Y sólo semanas antes de la fecha límite del Censo 2020, las tácticas de miedo utilizadas por el ICE a través de estas redadas sólo se suman a las dudas de los inmigrantes indocumentados, para completarlo.

A la luz de las inminentes redadas del ICE en la ciudad, el alcalde de Filadelfia Jim Kenney, un vocal oponente de las tácticas de inmigración de la administración Trump, emitió una declaración de que la ciudad "continuará dando la bienvenida, celebrando y luchando por los derechos de nuestros inmigrantes indocumentados y sus familias".

Sin embargo, el ICE está haciendo movimientos sin precedentes en línea con el régimen de la ley y el orden de Trump, lanzando vallas publicitarias en Pensilvania con los rostros de los inmigrantes que han sido liberados por los departamentos de policía locales en las jurisdicciones santuarias.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), junto con el Departamento de Justicia, han sido criticados por tales esfuerzos que apoyan externamente la agenda del Presidente justo un mes antes de una carrera reñida, especialmente porque el esfuerzo se está llevando a cabo en un estado indeciso.

Los críticos han llegado a decir que las acciones tienen la clara intención de intensificar las tensiones políticas antes de una elección presidencial.

"Este esfuerzo habla más ampliamente del deterioro de la relación entre ICE (y DHS) y las ciudades, especialmente aquellas en áreas liberales", escribió el reportero Hamed Aleaziz en Twitter. 

Las inminentes redadas del ICE fueron incluso descritas por los dos funcionarios más como "una campaña de mensajes políticos" que una gran operación del ICE, informó el Post, apuntando a las "ciudades santuario" liberales para ayudar a una campaña a través de la publicidad de los arrestos criminales. 

Durante el verano, el ICE arrestó a más de 2.000 inmigrantes, parte de una operación que supuestamente tenía como objetivo a personas con antecedentes penales. 

Pero este es un tema de la solidificación del partidismo del ICE y el DHS con una agenda política. Poco bien viene del encuentro de un inmigrante con un agente del ICE. La separación familiar, la calidad de vida y los derechos humanos básicos están en juego. Estén alerta.