Filadelfia está a punto de tener uno de los años más mortíferos de su historia en lo que respecta a la violencia con armas de fuego. 

Esto ha dejado a los líderes de la comunidad y del gobierno buscando respuestas y luchando, pero sin rendirse en sus esfuerzos.

El 13 de abril, el Ayuntamiento de Filadelfia dio a conocer su último esfuerzo. En una conferencia de prensa celebrada en la Fundación Nomo, en Broad y Girard, varios concejales se reunieron en una rara conferencia de prensa en persona para desvelar su Programa de Prevención de la Violencia y Oportunidades, de 20 puntos.

El anuncio se produjo un día antes de la reunión anual del alcalde Jim Kenney con el Consejo Municipal sobre el presupuesto operativo de Filadelfia para el próximo año. El Presidente del Consejo, Darrell Clarke, mencionó en su discurso que espera impulsar muchos de los esfuerzos enumerados para conseguir financiación para ellos, o su expansión.

Según un informe trimestral de los gestores municipales de mediados de febrero de 2021, Filadelfia se enfrenta a un déficit presupuestario de 450 millones de dólares de cara al año fiscal 2022. Dicho esto, la Ley del Plan de Rescate Americano del Presidente Joe Biden está trayendo 1.400 millones de dólares en fondos de ayuda de COVID-19, que Clarke llamó una "oportunidad".

Tanto él como los demás miembros del Ayuntamiento presentes en Nomo el 13 de abril, expusieron sus argumentos para invertir tanto en la prevención de la violencia como en las oportunidades económicas.

Clarke comparó la crisis de la violencia con armas de fuego en Filadelfia durante el último año con la provocada por la pandemia del coronavirus. Para responder, la ciudad también debe unirse y poner en común las soluciones.

"Hicimos lo que teníamos que hacer para abordar eso, pero ¿adivinen qué?", dijo. "Al mismo tiempo, esta es una situación muy similar en términos de crisis... Tenemos que hacer algo, y tenemos que hacerlo, como, ahora".

La tensión no sólo proviene de la gran cantidad de tiroteos y homicidios, sino también de que un número creciente de víctimas en 2020 y en lo que va de 2021, han sido niños y adolescentes.

"Los niños no están pudiendo jugar, ni hacer lo que tienen que hacer como niños", dijo Clarke.

La agenda desvelada apunta a desarrollar un mejor compromiso con los jóvenes en riesgo a través de organizaciones comunitarias en toda la ciudad (como Nomo) y a crear potencialmente centros de toque de queda que mantendrían a los jóvenes fuera de las calles a ciertas horas de la noche.

En su propio discurso, el concejal Kenyatta Johnson separó la necesidad de soluciones a la violencia armada de la política y elogió a sus colegas y a las organizaciones comunitarias por su trabajo en torno a este tema.

Sin embargo, dada su posición, hizo recaer sobre sus hombros la responsabilidad de resolver la violencia armada.

"La gente puede intentar venir y ayudarnos a hacer este trabajo, pero al final del día, nadie va a salvarnos, sino nosotros", dijo. "Cuando nos cansemos de estar hartos, es cuando cambiaremos la trayectoria de esta ciudad en lo que respecta al tema de la violencia armada sin sentido".

Las palabras de Johnson tuvieron eco en los discursos que siguieron de los concejales Curtis Jones Jr, Cherelle Parker y Cindy Bass.

Parker, en particular, se refirió a la importancia del acceso a las oportunidades para poner realmente fin a la violencia armada. En el proceso, señaló la hipocresía de tales iniciativas si no incluyen a las comunidades negras y marrones

"Es tan fácil para la gente decir simplemente 'es un asunto de justicia social', levantar el puño en el aire y decir 'las vidas de los negros importan' hasta que empezamos a hablar del acceso a las oportunidades", dijo Parker. "Eso es que los negros y los morenos tengan negocios, que nuestros jóvenes tengan acceso a oportunidades de trabajo".

En el ámbito de las oportunidades, la agenda del Ayuntamiento incluye la creación de otro Comité Especial del Ayuntamiento sobre Estrategias de Formación Laboral y Desarrollo de la Fuerza de Trabajo, su iniciativa de 10 millones de dólares "New Normal Jobs", y más asociaciones con organizaciones comunitarias para la formación laboral y la colocación de la fuerza de trabajo, entre otras ideas e iniciativas.

Otros puntos clave de la agenda son el Fondo de Acción contra la Pobreza del Ayuntamiento, dotado con 10 millones de dólares, la creación de la Oficina del Defensor de las Víctimas, la demanda pendiente contra Pensilvania por no haber aprobado leyes más estrictas en materia de armas y la previsión, y varias ideas y acciones de reforma policial.