Las elecciones de mitad de período del 2018 son la muestra de que el país no se quedará de brazos cruzados ante el racismo y la misoginia que emana la Casa Blanca.

Después de los resultados en primarias como las de Texas – donde las mujeres fueron las verdaderas vencedoras – esta vez el estado de Nuevo México tiene dos campeonas, y las dos son Latinas.

En una carrera por convertirse en la primera mujer miembro del congreso en el estado, Xochitl Torres Small – abogada y ex miembro del equipo del senador Tom Udall – ganó el día martes la nominación del partido demócrata para competir contra Yvette Herrell en las elecciones de noviembre.

Nieta de inmigrantes mexicanos y esposa de un legislador estatal, Torres Small “raramente mencionó el nombre de Donald Trump durante su campaña y le dijo a los dueños de armas que ella poseía una y pospuso su luna de miel para ir de caza”, recordó la plataforma KANW.

Pero fueron sus “profundas raíces en la comunidad” lo que le dio la ventaja durante las elecciones, así como su personalidad única y sus posturas contra la política de Washington.

Otra de sus propuestas de campaña fue el acceso a la cobertura médica por parte de ciudadanos de áreas rurales, para lo que prometió precios bajos y mayor accesibilidad, en especial tras su experiencia al crecer en Las Cruces y haber trabajado en el equipo del senador Udall.

“Esto le permitió tener experiencia de primera mano trabajando con rancheros, campesinos y conservacionistas para encontrar soluciones locales a algunos de los problemas más difíciles de la región”, explicó en un comunicado el equipo del Comité de Campaña Demócrata al Congreso (DCCC), que apoyó a la candidata desde sus inicios.

De vencer a su oponente en noviembre, Torres Small se transformará en una pieza clave para la campaña demócrata, en un asiento que ha sido controlado por el partido Republicano durante más de una década.

Por su parte, la congresista Michelle Lujan Grisham ganó la nominación demócrata para la gobernación de Nuevo México, puesto actual de la primera gobernadora latina republicana de la nación, Susana Martínez.

La congresista venció al senador Joseph Cervantes y al ejecutivo Jeff Apodaca en la nominación, a través de una campaña enfocada en la educación pública y en la economía.

Su candidatura recibió gran apoyo por parte de sindicatos laborales y grupos progresistas.

Asimismo, Luján – quien también preside el Caucus Hispano en el Congreso – ha sido una de las mayores voces de oposición a la Administración Trump, en especial por sus posturas anti-inmigratorias, y posee experiencia en las agencias de salud pública del estado.

Si bien deberá enfrentarse al candidato electo por los republicanos, el representante Steve Pearce, el estado de Nuevo México ha votado Demócrata en las tres últimas elecciones presidenciales y, según explicó el Washington Post, los analistas consideran que esta contienda será una de las oportunidades más prometedoras para el partido azul.

De ganar, Luján Grisham se transformaría en la primera gobernadora latina demócrata en la historia del país.