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CLINT, TX - 1 DE JULIO: La Representante Alexandria Ocasio-Cortez (D-NY) se dirige a los medios de comunicación después de visitar el Centro de Patrulla Fronteriza de Clint, TX que alberga niños el 1 de julio de 2019 en Clint, Texas. Informes de condiciones inhumanas han plagado las instalaciones donde están retenidos los niños migrantes. (Foto de Christ Chavez/Getty Images)
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De campos de concentración a grupos privados de Facebook: cuando la podredumbre de la CBP sale a la luz

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Últimamente, leer las noticias sobre la política en Estados Unidos es como recibir una patada directa a la boca del estómago.

Pero la reciente historia de ProPublica (una sala de redacción que investiga el abuso de poder en Estados Unidos) que reveló la misoginia, el racismo y la vulgaridad entre oficiales de la Patrulla Fronteriza en un grupo privado de Facebook, reta los niveles de tolerancia de cualquiera.

El grupo conocido como “I’m 10-15” (código que significa “ilegales bajo custodia” en la Agencia), cuenta con un aproximado de 9.500 miembros que “bromeaban sobre la muerte de inmigrantes, hablaron sobre cómo lanzar burritos a miembros Latinos del Congreso” y hasta publicaron una ilustración vulgar de la representante Alexandria Ocasio-Cortez.

Antes de que cualquiera sugiriera la maleabilidad de la Primera Enmienda, tanto las redes como el Caucus Hispano del Congreso han denunciado la agresividad y la cultura de odio que parece estar profundamente enraizada en la agencia gubernamental.

“Lo que estos oficiales han publicado en línea es despreciable, racista y absolutamente inaceptable”, dijo Jess Morales Rocketto, presidenta de la organización Families Belong Together. “El Congreso debe responsabilizar a la CBP por una cultura de racismo que es claramente evidente en sus filas”.

La historia de ProPublica salió a la luz tan sólo horas antes de la visita de los congresistas a dos centros de detención para inmigrantes en Texas el lunes, donde una docena de representantes demócratas – entre ellos Alexandria Ocasio-Cortez, Joe Kennedy III, Madeleine Dean, Rashida Tlaib y Joaquín Castro - vieron de primera mano el maltrato que se ha venido denunciando desde hace meses.

“Es difícil subestimar el tamaño del problema”, escribió Ocasio-Cortez en su cuenta de Twitter. “Estamos hablando de crueldad sistémica, con una cultura deshumanizante que los trata como a animales”.

Los congresistas visitaron las instalaciones ubicadas en El Paso y Clint, descritas por abogados en una demanda nacional como peligrosamente inadecuadas, y descubrieron que las palabras no bastaban para pintar el escenario.

“(La CBP) mantenía a las mujeres en las celdas sin agua y les habían dicho que bebieran de los retretes”, continuó Ocasio-Cortez. “El pelo de algunas mujeres se estaba cayendo”.

“Las condiciones son mucho peor de lo que podíamos haber imaginado”, dijo Madeleine Dean. “Esta es una crisis de derechos humanos”.

Mientras tanto, la diatriba se transforma en un asunto absolutamente político, mientras miles de inmigrantes sufren las consecuencias.

Altos funcionarios de la CBP aseguraron que los comentarios del grupo de Facebook eran una “violación a los estándares de conducta de la agencia”, y que iniciarían una investigación de inmediato.

Sin embargo, el National Border Patrol Council, sindicato laboral de los agentes fronterizos, condenó las publicaciones por considerarles “inapropiadas” y que “no representan a nuestros empleados”. Pero agregó que “esté o no de acuerdo con las políticas de la Rep. Ocasio-Cortez y la Rep. Escobar, ambas deben ser tratadas con dignidad y respeto. De manera similar, cuando la Rep. Ocasio-Cortez se refiere a las instalaciones de la CBP como campos de concentración y a nuestros agentes como nazis – cuando ninguna de las dos (aseveraciones) podría estar más lejos de la verdad – ella no hace nada para mejorar el discurso político”.