En una entrevista con José Díaz-Balart de Telemundo, el presidente Donald Trump hizo una sorprendente revelación. 

"Voy a estar en las próximas semanas firmando un proyecto de ley de inmigración que mucha gente no conoce... Uno de los aspectos del proyecto de ley va a ser DACA. Vamos a tener un camino para la ciudadanía", dijo Trump en la entrevista.

La Acción Diferida para la Llegada de los Niños (DACA) es un programa que entró en vigor bajo la administración de Obama. Da protección legal para trabajar y buscar educación superior a los inmigrantes indocumentados que fueron traídos a los EE.UU. a una edad temprana. 

A partir de marzo de 2020, el programa ha ayudado a 643.560 personas en todo el país. Se les conoce como DREAMers por el DREAM Act, un proyecto de ley que nunca ha sido aprobado y que habría otorgado estatus legal a los indocumentados que llegaron cuando eran niños. 

La nueva apertura de Trump hacia los aspectos de la reforma integral de la inmigración es sorprendente porque recuerda a la DREAM Act, que fue adoptada por su predecesor. 

En el tiempo que lleva en el cargo hasta ahora, el presidente ha abogado por un muro a lo largo de la frontera sur con México, ha separado a los niños migrantes de sus padres mientras los mantenían en jaulas y ha tratado de poner fin al programa DACA. 

Trump no sólo ha atacado a los niños indocumentados en el pasado, sino que también ha condenado a los niños estadounidenses nacidos de un padre indocumentado amenazando con revocar la ciudadanía por nacimiento, que está consagrada en la 14ª enmienda de la Constitución.

"Y los demócratas quieren seguir dando la ciudadanía automática por derecho de nacimiento a cada niño nacido de un extranjero ilegal... cientos de miles de niños inmigrantes ilegales se convierten en ciudadanos automáticos cada año debido a esta loca política y todos ellos se hacen inmediatamente elegibles para todos los privilegios y beneficios de la ciudadanía americana", dijo mientras hacía campaña para las elecciones de mitad de período de 2018.

El presidente ordenó la anulación de la DACA en septiembre de 2017 y la medida fue bloqueada por los tribunales inferiores, pero finalmente llegó a la Corte Suprema. Desde 2017, el programa no ha aceptado nuevos solicitantes y se limitó sólo a renovaciones.

El 18 de junio, la Corte Suprema dictaminó 5-4 que Trump no podía terminar el programa basado en los argumentos que presentó. 

Esto fue celebrado por los Soñadores, pero el fallo aún los dejó en un limbo legal porque no les dio una solución permanente. El presidente ha dicho que va a volver a presentar los papeles a la Corte Suprema para tratar de quitar el programa de nuevo. 

Su intento de volver a presentarlo fue recibido con la reacción de la comunidad empresarial. Una carta de la Coalición por el Sueño Americano sugirió que Trump dejara el programa en paz por lo integral que han sido los beneficiarios de DACA en la lucha contra la crisis de COVID-19.

"Los beneficiarios de DACA han sido miembros críticos de nuestra fuerza de trabajo, industrias y comunidades durante años, y han acatado las leyes y regulaciones de nuestro país para mantener su estatus de DACA", escribieron los miembros de la coalición. 

De acuerdo con la Asociación Médica Americana, 30.000 beneficiarios de la DACA trabajan como profesionales de la salud en todo el país.

Con la administración Trump contemplando un camino a la ciudadanía para los receptores de DACA, parece que sus esfuerzos para terminar el programa sería forzar al Congreso a llegar a una solución bipartidista para el futuro de cientos de miles de personas que sólo han conocido a los EE.UU. como su país. 

Todavía no está claro si el presidente pretende hacer esto a través de una orden ejecutiva o mediante la presentación de un proyecto de ley. 

Lo que está claro es que la Casa Blanca no quiere que el público piense que la propuesta irá más allá de los Soñadores. El portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, dijo que esto "no incluye la amnistía" para todos los inmigrantes indocumentados.

Trump le dijo a Díaz-Balart que tiene la intención de introducir el nuevo plan de inmigración en las próximas cuatro semanas.