Desde el momento en que lanzó su campaña en 2015 el programa antiinmigrante del ex presidente Donald Trump ha causado un daño irreparable a millones de personas. 

La administración Trump promulgó políticas que hicieron casi imposible que los centroamericanos buscaran asilo. Redujeron las admisiones de refugiados, limitaron el acceso a los servicios de inmigración y complicaron aún más el ya agotador proceso de solicitud de la ciudadanía. Y estos son solo algunos ejemplos. 

Después de soportar cuatro largos años de políticas anti-inmigración y retórica xenófoba, los líderes de los derechos de inmigración y los representantes de Latinx se apresuraron a instar a la administración entrante de Biden a tomar medidas sobre estos temas. 

Hasta ahora, el Presidente Biden ha estado escuchando y tomando notas. 

El nuevo presidente planea enviar una propuesta al Congreso que provea un camino a la ciudadanía para aproximadamente 11 millones de inmigrantes indocumentados que viven en los Estados Unidos. Este plan también ofrecerá protección inmediata contra la deportación a millones de personas. 

"Esta legislación proporciona nuevos caminos hacia la ciudadanía, promueve controles fronterizos inteligentes y aborda las causas fundamentales de la migración", dijo Susan Rice, asesora de política interna de Biden. "El proyecto de ley también crea un camino ganado a la ciudadanía para los soñadores, los trabajadores agrícolas y los trabajadores esenciales que arriesgan sus vidas para servir y proteger a las comunidades estadounidenses" continuó explicando. 

Trump hizo todo lo que estuvo a su alcance para mantener a las familias separadas entre sí, pero Biden se está centrando en la reunificación familiar. 

También está tratando de aumentar el programa de visas de diversidad que la administración Trump intentó erradicar. Esto aumentaría las plazas de visado disponibles de 55.000 a 80.000. 

El proyecto de ley también pide que se inviertan un total de 4.000 millones de dólares durante cuatro años en ayuda para las naciones de El Salvador, Honduras y Guatemala para ayudarles a abordar los problemas que provocan la migración a los EE.UU. en primer lugar. 

Biden espera restablecer un programa que concedía a los menores de América Central la residencia legal temporal en los EE.UU., un programa que fue terminado en agosto de 2017 por la administración Trump. 

Aparte del proyecto de ley, Biden también se propone firmar acciones ejecutivas que revertirían la prohibición de viajar de Trump a un grupo de naciones principalmente musulmanas, derogar las órdenes de enfrocamiento de inmigración de Trump y detener la construcción de su muro en la frontera sur con México. 

El senador estadounidense Bob Menéndez (D-NJ), quien ha pasado décadas luchando por los derechos de los inmigrantes y las reformas al sistema quebrantado de nuestra nación, anunció hoy que dirigirá los esfuerzos legislativos en el Senado e introducirá el proyecto de ley para construir un sistema más humano, justo y funcional.

Como hijo de inmigrantes cubanos, el Senador Menéndez dijo que está preparado y emocionado de trabajar con la administración Biden-Harris para sanar los daños y reconstruir. 

"Este plan no sólo se trata de arreglar nuestro roto sistema de inmigración, sino de construir uno mejor que reúna a las familias, saque a la comunidad indocumentada de las sombras y la ponga en camino hacia la ciudadanía, defienda los derechos humanos, aborde las causas fundamentales de la migración e incluya una estrategia inteligente de seguridad fronteriza", escribió Menéndez en una declaración. 

Aunque Menéndez es consciente de lo desalentador de la tarea de pasar la inmigración antes de que pase por el Congreso está listo para el desafío: "Hay un imperativo moral y económico para hacer esto".