Miembros del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de EE.UU., incluido el Secretario Xavier Becerra, viajaron a Filadelfia el 15 de julio, antes del lanzamiento de una línea telefónica única de salud mental diseñada para ayudar a las personas que sufren de ideación suicida. 

En un acto celebrado en The Consortium, un centro de tratamiento orientado a la recuperación, el secretario Becerra celebró una mesa redonda y una rueda de prensa antes de la puesta en marcha de la línea directa 988, que está destinada a sustituir al 911 como línea de prevención de crisis.

"Lo que hemos aprendido en Filadelfia, a veces por las malas, es que toda respuesta a una crisis no es el 911", dijo el alcalde de Filadelfia, Jim Kenney, cuando Becerra le preguntó qué hace falta para abordar la salud mental a nivel municipal. 

"Estamos poniendo una carga en nuestra policía, [porque] no siempre están seguros de lo que se encuentran. (...) El 911 era para todo, y tenemos que alejarnos de eso", continuó.

Un estudio realizado por la Fundación Americana para la Prevención del Suicidio (ASFP) reveló que, a escala nacional, el suicidio es la décima causa de muerte. En Pensilvania, es la 11ª causa de muerte.

Aplicación de la ley y salud mental

Hasta 2020, el Departamento de Policía de Filadelfia no tenía un código para las llamadas de salud mental, lo que llevó a la ciudad a instalar un protocolo para desviar las crisis relacionadas con la salud mental al personal adecuado. 

"Este ha sido un esfuerzo de varios años para transformar nuestro sistema de crisis en Filadelfia", dijo la doctora Jill Bowen, comisionada del Departamento de Servicios de Salud Conductual y Discapacidad de Filadelfia. 

"En última instancia, queremos un sistema que mitigue el trauma. Si una persona ya está angustiada, la respuesta es rebajar ese estrés, rebajar ese trauma y garantizar que no haya un trauma añadido por parte del sistema como respuesta", añadió.

"Cuando uno está en apuros, lo que necesita es una respuesta comunitaria", señaló la Dra. Bowen.

En Pensilvania, la Administración de Abuso de Sustancias y Salud Mental recibió 3 millones de dólares de la administración Biden para apoyar la ambiciosa capacidad de ejecución de 988 planes, según una declaración de Becerra durante una conferencia de prensa para el lanzamiento.

Depende de los estados

Sin embargo, más allá del presupuesto asignado por el HHS, no hay ninguna legislación actual para financiar el 988 a nivel operativo en la Commonwealth. 

"No se trata de un programa federal", señaló Becerra al abordar la preocupación de sobrecargar un sistema ya limitado.

"Teníamos recursos para ayudar a nuestros estados a poner en marcha las operaciones que necesitan (...) Muchos [estados] están mejorando; muchos se han comprometido realmente a tener una fuente de financiación sostenida para el 988 en adelante", continuó. 

"¿Qué va a hacer falta? Como he dicho: el gobernador tiene que hacerse cargo de esto", añadió Becerra, haciendo hincapié en el papel del estado en la aprobación de la legislación para construir un modelo de centro de llamadas sostenible y duradero para gestionar las crisis de salud mental.

En la actualidad, Pensilvania no cuenta con leyes que respalden esta operación. 

Con la llegada del 988, estos servicios estarán disponibles para los necesitados a través de llamadas telefónicas y mensajes de texto, un esfuerzo liderado por Jessica Rosenworcel, presidenta de la Comisión Federal de Comunicaciones. 

"Algo de lo que estoy especialmente orgullosa como resultado de nuestro trabajo en la FCC, es que podrán enviar mensajes de texto utilizando esos 3 dígitos", dijo Rosenworcel. 

Con la ampliación de los servicios, aún no está claro si existen modelos estructurales para apoyar dicha operación en la fecha de lanzamiento, pero Becerra se mostró confiado en que estos servicios abordarán las áreas de preocupación que requieren con mayor urgencia estos servicios. 

"El Presidente Biden hablaba en serio. Ahora necesitamos que todos los demás también hablen en serio".