A medida que se acerca el Super Bowl LVII este domingo, muchos compradores están deseando organizar reuniones y disfrutar del partido con comida y amigos. Para ayudarles a tomar las mejores decisiones, Wells Fargo ha elaborado un informe sobre los alimentos a mejor precio para comprar el día del gran partido.

Aunque la inflación de los alimentos ha subido, los precios pueden variar entre comprar en el supermercado y comprar en un restaurante, ya que los precios de los alimentos en casa han subido un 11,8%, mientras que los precios fuera de casa sólo han subido un 8,3%.

Pero a pesar de la subida de precios, algunos de los favoritos de los fans están viendo descensos en los precios, ya se trate de una selección de carnes o de simples tentempiés.

Un favorito de los aficionados ha experimentado un aumento significativo de la oferta: las alitas de pollo. A medida que los productores avícolas han aumentado, los precios han experimentado un descenso. El año pasado, el informe semanal del USDA sobre precios al por menor situaba las alitas de pollo en 3,38 dólares la libra durante la semana de la Super Bowl. 

Pero a partir del 6 de enero de este año, las alitas de pollo enteras se venden a sólo 2,65 dólares la libra, un cambio bienvenido para los aficionados que quieran comer en su pub o restaurante favorito durante el partido, o para los que quieran ver la Super Bowl en casa.

Otras carnes que han bajado de precio son el solomillo (a 1 dólar la libra desde diciembre), las hamburguesas, que se recuperan de su máximo del 4 de julio, y el beicon y las gambas.

Mientras que los aguacates del año pasado tuvieron problemas con la cadena de suministro en México, la cosecha de este año ha llegado bastante bien a EE.UU., y Wells Fargo ha registrado una caída de precios del 20% desde el año pasado, lo que permite que el guacamole vuelva a la mesa sin estresar la cartera.

Aperitivos como los chips de tortilla y las patatas fritas siguen siendo los favoritos de los fans, con una demanda en aumento a pesar de las subidas de precios de dos dígitos que se han producido desde 2021.

Los mayores cambios en el precio de las bebidas llegan a los refrescos, con un aumento de precios del 25% al subir también los ingredientes y los gastos de envío, aunque siguen estando dentro de un rango asequible con 2,13 dólares de media. 

La cerveza también se ha encarecido, un 11%, al igual que el vino y los licores, un 4% y un 2% respectivamente.

Para el comprador avispado, el impacto de estos precios puede reducirse estando atento a los mejores precios y comprando con inteligencia.