Nota del editor: Esta traducción fue realizada por AmaRa Pedreros

Cuando Erika Guadalupe Nuñez asumió la posición de directora de Juntos en marzo del 2020, describió que la organización estaba pasando por un momento de “transición significativa”. 

Juntos había estado trabajando en la comunidad por 18 años en asuntos de inmigración, desarrollo de jóvenes y enseñado ingles solo para nombrar unos pocos, pero cuando llego Nuñez solo había otro miembro del equipo y trabajaban medio tiempo. 

Ademas de esto, la ciudad dio el anuncio de cierre por la pandemia en su primer día de trabajo. 

“En muchas formas era como empezar de nuevo”, le dijo Nuñez a AL DIA dos años y medio después de ese difícil inicio, mientes ella y su equipo de 10 personas planeaban la celebración del 20 aniversario de Juntos. “La pandemia en realidad nos obligó a enfrentarnos con esto”. 

“Que es lo que esta funcionando? Qué es lo que no esta funcionando”? fueron las preguntas principales en ese momento. “En ese momento no había tiempo para pensar en otra cosa que no fuera para el bien estar de la comunidad”. 

Contestando estas preguntas y desarrollando un plan de acción, lo qual empezó con una encuesta a 2,000 miembros de la comunidad, preguntando que necesitaban en ese momento de la pandemia, Nuñez estaba dejando su sello en Juntos y, a la vez reafirmando los principios fundamentales de la organización y su trabajo en la comunidad Latinx del Sur de Filadelfia. 

Fundada en Tiempos Difíciles 

En el 2002, Juntos fue el resultado de un cambio que empezaba a echar raíces en el sur de Filadelfia. Esto fue la llegada en grandes cantidades de migrantes Latinx, predominantemente de Mexico.

Fue un momento tumultuoso para cualquier persona que fuera un inmigrante en Filadelfia, y ni que decir del resto del país que acababa de pasar por los ataques de 9/11 que cultivaron sentimientos de animosidad hacia recién llegados, algo que persiste hasta hoy. 

“La gente desaparecía, era detenida por la policía y tres dias después aparecían en centros de detención. Nos dimos cuenta que existían bases de datos, les tomaban las huellas a los detenido y, que quizás la misma policía estaba en colaboración con ICE”. Esto comento Erika Almiron, la antigua directora ejecutiva de Juntos, en una entrevista a Al DÍA en el 2018, con motivo de la celebración de los 15 años de trabajo en la comunidad. 

En ese entonce, dos estudiantes de la Universidad de Pennsylvania, viajaron hacia la creciente comunidad migrante del sur de Filadelfia, con la esperanza de empezar un proyecto de agricultura urbana. Uno de esos estudiantes, Peter Bloom, se convertiría, tiempo después, en el co-fundador de Juntos.

Dicha idea desapareció rápidamente, y Bloom junto con otros amigos comenzaron a usar el sótano de la Iglesia de St. Aquinas para enseñar classes de Ingles a miembros de la comunidad local. 

De acuerdo a Nuñez, esas clases no solo sirvieron para enfrentar la barrera del lenguaje, pero también permitieron abordar asuntos de inmigración, ayuda mutua, vigilancia policiaca y de seguridad. 

El grupo unió fuerzas con otros lideres de la comunidad mexicana en el sur de Filadelfia, como Cristina Perez de la organización de mujeres organizadas contra la violación, Edgar Ramirez, fundador de Philatinos Radio, Leticia Nixon, Carlos Rojas, y Dalia O’Gorman, entre otros. 

Junta en el Condado de Montgomery

Nuñez conoció a JUNTOS en una protesta que organizo como parte del Movimiento del Poder Migrante en el centro correccional del Condado de Montgomery en el 2012. En ese momento, el centro tenia un contrato con ICE, y autoridades locales estaban incrementando la vigilancia en las comunidades de inmigrantes para llenar las camas del centro. 

Ella fue una de los tres individuos arrestados por bloquear el tráfico de entrada y salida del centro, pero antes de ser arrestada, Nuñez recuerda haber visto miembros de Juntos en la protesta llevando sus playeras verdes que decían ‘Si Se Puede’

Recuerdo oír “oh ellos son de Philly, están aquí para apoyar”, y me sentí muy emocional’ comento Nuñez. 

Esa primera interacción dejo a Nuñez queriendo saber más acerca de la organización, y empezó a asistir a eventos de Juntos, se unió al comité enfocado en asuntos de la comunidad LGBTQ, y empezó a crear arte para las campañas y protestas de la organización. 

El componente artístico en la organización alcanzo nuevos niveles en el 2013, cuando Juntos organizo su primera acción de desobediencia civil el día de la virgen de Guadalupe enfrente de la antigua oficina central de ICE en Filadelfia. Como la protesta que Nuñez había organizado un año antes afuera del centro correccional del Condado de Montgomery, el grupo bloqueo las puertas del garage que daban acceso al centro, de esta forma impidiendo el transporte de migrantes a otros centros de detención fuera del estado. 

Nuñez pintó dos pancartas en preparación para la acción y utilizo serigrafía para otros carteles.

“Comenzó un cambio”, dijo sobre la acción, específicamente el uso de imágenes como las que ella creó. “El arte y la cultura se convirtieron en herramientas concretas que la organización estaba utilizando en sus protestas”.

También representó un cambio en su relación con Juntos, ya que Nuñez  se convirtió en su artista residente y continuó creando componentes visuales para las varias acciones y programas de la organización.

Solo el pueblo

Durante los siguientes ocho años, Nuñez tendría varios roles sin pago en Juntos ademas de ser la artista en residencia. Eventualmente, seria parte de la mesa directiva, pero dejo el cargo antes de que saliera la convocatoria para un nuevo director ejecutivo.

“En ese momento fue muy claro para mí lo que yo quería hacer”, comento Nuñez acerca de la oportunidad de convertir su carrera como organizadora comunitaria en algo más formal.  

Aplico, le dieron la posición, y asumió el cargo con energía y una serie de objetivos para la organización que incluían establecer un modelo de membresía formal e invertir de manera más significativa en los programas juveniles de Juntos, pero una crisis de salud mundial tomo prioridad.

“Podíamos tener estas metas de establecer un modelo de membresía y programs en persona para los jóvenes, pero esto valía muy poco sin una respuesta a la pandemia”, dice Nuñez.

Apoyando la comunidad Latinx del sur de Filadelfia desde los primeros días de la pandemia fue un asunto personal para la directora ejecutiva de Juntos debido a sus raíces. 

“Me crie en una comunidad igual a esta” dice Nuñez. “ Era muy importante estar ahi apoyando a mi comunidad de cualquier manera que fuera posible”.

Nacida en Sinaloa, Mexico, a una temprana edad Nuñez emigró con sus padres a los Estados Unidos. Creció indocumentada, pero consider Phoenix, Arizona su hogar, le explico a AL DÍA.

Ahí, Nuñez experimento de primera mano las duras realidades de ser indocumentada, ya que el estado implemento leyes como la SB 1070 que permita que las autoridades policiacas solicitaran documentación cuando ellos quisieran de individuos que sospecharan que fueran indocumentados. Ella recuerda que su madre no la dejaba salir de la casa por meses debido a miedo de que tales regulaciones separaran a su familia. 

Esas barreras solo se incrementaron cuando la familia de Nuñez necesito acceso a cuidado medico, a su vez que ella estaba aplicando a la universidad, meses después de que otra version de la iniciativa conocida como DREAM fuera rechazada por el Congreso. 

Estas experiencias son compartidas por la comunidad Latinx del sur de Filadelfia, y continuan estando presentes hasta el día de hoy. 

Solo un mes antes de que la pandemia llegara a la ciudad, una madre embarazada fue detenida por ICE afuera de la escuela primaria Eliza B. Kirkbride en el sur de Filadelfia, mientras dejaba su hija en la escuela. Aunque fue dejada en libertad tiempo después por razones humanitarias, esto dejo una sensación de miedo en la comunidad.

A pesar de un miedo constante y la posibilidad de un daño siempre presente, Nuñez comento que cuando ella llego en el 2009, la comunidad la recibió con los brazos abiertos. Todo esto le reafirmo a Nunez la importancia de su trabajo en la comunidad cuando llego la pandemia.

“Parte de esto es cuidarlos como si fueran mi familia”, dice Nuñez.

Su mensaje a la comunidad y a todos que eventualmente vendrán a trabajar con o para Juntos bajo su liderazgo es lo siguiente: “Solo el pueblo salva el pueblo”.

Debido a una pandemia que expuso el abandono del gobierno por largo tiempo, así como de las grandes empresas y el sistema educativo, le tocó a la gente de la comunidad encontrar sus propias soluciones y luchar.

“Solo nosotros nos podemos cuidar. Solo nosotros sabemos lo que necesitamos. Solo nosotros tenemos la empatía para cuidar de nuestra comunidad”, dice Nuñez, agregando a su mensaje. “ No deberíamos esperar para un politico elegido o una organización sin animo de lucro para que nuestra situación cambie. No podemos vivir así. En estos momentos, sobrevivencia y resiliencia son algo que construimos Juntos”.

La respuesta inmediata de Juntos después de encuestar a 2,000 residentes en los primeros días de la pandemia fue lanzar un programa de despensas, ya que descubrió que la inseguridad alimentaria era el problema más frecuente en la comunidad.

Las mismas motivaciones centradas en la comunidad estuvieron detrás de el movimiento de escuelas santuario, que surgió después del arresto de la madre por ICE afuera de la escuela primaria en el sur de Filadelfia. Tres meses después de su lanzamiento, los concejales de Filadelfia aprobaron una resolución que adoptaba muchas de las medidas sugeridas para el distrito escolar.

Actualmente, Nuñez comenta que hay discusiones detalladas acerca de la campaña, la cual busca mas que solo cortar la cooperación con ICE.

“Santuario es más que no cooperar con ICE. Santuario es acceso de lenguaje, no ser criminalizado, acceso a recursos, inversión en las comunidades, inversion en las escuelas”, dice Nuñez.

También hay un gran esfuerzo para apoyar a más familias recién llegadas, específicamente a las que están llegando de Centro America y no solo de Mexico. 

Otra campaña que Nuñez destacó fueron los esfuerzos por parte de Juntos para cerrar el Centro de Detención del Condado de York, lo cual llevo a la liberación de 113 migrantes antes de su traslado a otras instalaciones.

JUNTOS a través de las generactiones

La planificación para la gala del vigésimo aniversario, que fue el sábado 17 de septiembre en el santuario de arte de Fleisher, le permitió a Nuñez poner todo este trabajo en perspectiva. 

“Que una organización como juntos llegue a cumplir 20 años es un logro increíble”, dice Nuñez. "Juntos solo ha crecido lo que se propuso hacer, que era apoyar a los miembros de nuestra comunidad inmigrante con lo que necesitaran, lo cual se logro de la mano del liderazgo de la comunidad”.

En el proceso, dijo que ha sido “gratificante” conocer a algunas de las diferentes generaciones de las organizaciones y ver su misión "fortalecerse y crecer".

Muy lejos de ser la única empleada al inicio de la pandemia, Nuñez ahora también cuenta con un equipo de 10 personas que siguen realizando un trabajo impactante y, que no dejan de intentar cosas nuevas para enriquecer a la comunidad.

Un hogar permanente y nuevas fronteras 

Ahora, expresa que la organización usara todo lo que recauda en la gala para la construcción de un hogar permanente para Juntos en el sur de Filadelfia. También estará registrando gente para votar como parte de una nueva campaña por primer vez en su historia. 

El nuevo esfuerzo es una evolución de Juntos, justo al lado de la comunidad que ha llamado hogar durante 20 años.

“Cuando se fundo Juntos, estaba ofreciendo clases de ingles a un grupo de gente. Todos ellos tuvieron hijos y ahora tienen la edad para votar”, dice Nuñez sobre los orígenes de la nueva campaña. 

Con esa nueva generación y campaña de registro de votantes, hay una inmensa emoción dentro de la organización sobre el potencial de impacto y la esperanza para el futuro.

"Puedes estar cívicamente comprometido de una manera que tu familia no lo estaba", fue el mensaje de Nuñez. "Ustedes podrían ser el cambio que queremos ver".