Se acerca el momento de que los líderes del Congreso finalicen la legislación para ampliar la elegibilidad de las becas Pell para los estudiantes inscritos en programas de corta duración.

El proyecto de ley fue aprobado por el Senado el año pasado, pero sin una enmienda que examine y amplíe el lenguaje utilizado, muchos estudiantes se quedan sin cobertura financiera.

Los líderes universitarios calificaron la exclusión de los programas sólo en línea como un error que afectaría a los adultos que trabajan y que tratan de asistir a la escuela mientras cumplen con sus obligaciones financieras y familiares.

Los educadores escribieron en una carta que "el lenguaje que excluye los programas en línea es una penalización, no una protección, para aquellos estudiantes para los que los programas en línea son su único punto de acceso a la educación y la formación", según informó Higher ED Dive.

Los legisladores continúan abogando por cambios en el lenguaje del proyecto de ley y por la inclusión de programas de menor duración que den lugar a una credencial de la industria para recibir Pell.

Según Higher ED Dive, "dada la preocupación por las desigualdades raciales y de género en los programas de corta duración, sin embargo, a algunos expertos en políticas les preocupa que permitir que sean elegibles para las becas Pell perjudique a los estudiantes."

Sin embargo, muchos siguen teniendo reservas sobre los programas en línea, y sobre su legitimidad y capacidad para ofrecer una educación de alta calidad.

Los adultos que trabajan siguen enfrentándose a una serie de barreras cuando intentan acceder a la educación del modelo tradicional. Las obligaciones que tienen los adultos que trabajan, hacen imposible seguir un formato de educación tradicional debido a los retos siempre cambiantes. Durante la pandemia e incluso después de la misma, muchos estudiantes encontraron conveniente el aprendizaje en línea.