El senador Ben Sasse recibe un aumento de más de 900.000 dólares como presidente del UF
La Junta de Gobernadores de Florida confirmó a Sasse como nuevo Presidente de la Universidad de Florida, aprobando un contrato de 5 años.
Ben Sasse se convirtió en senador de los Estados Unidos por Nebraska en 2014 tras ganar los 93 condados. En 2020, se presentó a la reelección, estableciendo un récord de "la mayor cantidad de votos en la historia de Nebraska, ganando de nuevo los 93 condados."
Estudió en la Universidad de Harvard, donde se graduó con una licenciatura en 1994, un máster en el St. John's College (1998) y en la Universidad de Oxford. Más tarde, realizó un doctorado en Historia en la Universidad de Yale, graduándose en 2004.
La carrera profesional de Sasse comenzó en el Boston Consulting Group y luego en McKinsey and Company, asesorando a empresas privadas, compañías federales y grupos civiles en Irak. También trabajó en el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. antes de convertirse en Subsecretario de Planificación y Evaluación del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.
Antes de ser elegido para el Senado, enseñó en la Universidad de Texas, y posteriormente fue presidente de la Universidad de Midland, en Nebraska, durante cinco años.
"Ben tenía sólo 37 años, lo que le convierte en uno de los presidentes de universidad más jóvenes del país", según la página web del senador por Nebraska. "La universidad luterana de 130 años de antigüedad en la ciudad natal de Ben estaba al borde de la quiebra cuando él llegó, pero se convirtió en una de las escuelas de más rápido crecimiento del país sólo tres años después".
Hoy, la Junta de Gobernadores de Florida ha confirmado al senador estadounidense Ben Sasse como decimotercer presidente de la Universidad de Florida, aprobando un contrato de cinco años que se espera que comience el 6 de febrero de 2023, con la posibilidad de una prórroga de un año.
La Junta también aprobó un salario de un millón de dólares con un aumento anual del 4% si la institución determina que el Dr. Sasse ha alcanzado los objetivos a corto y largo plazo. Además, ganará 200.000 dólares por cada año como presidente, "más hasta un 15% de su salario base si cumple los objetivos de rendimiento establecidos por la universidad".
El contrato también establece que la Junta puede despedir al Dr. Sasse sin causa "previa notificación por escrito con al menos sesenta días de antelación".
Preocupa que el GOP intente influir en las universidades de Florida
La Universidad de Florida (UF) alcanzó un hito tras superar por primera vez los mil millones de dólares en gastos de investigación en 2022.
"Superar el hito de los mil millones de dólares en investigación refleja el continuo ascenso de la UF como una de las principales universidades de investigación de los Estados Unidos", dijo el vicepresidente de investigación de la UF, David Norton. "Pero esta cifra representa mucho más que dólares: representa el valor del notable intelecto y talento de estos investigadores y su impacto en nuestro estado, nuestra nación y el mundo".
Sin embargo, la UF se ha visto envuelta en muchas controversias, especialmente en las acusaciones de que "el GOP está intentando influir en las universidades de Florida", como afirma Higher ED Dive. "El sistema público de educación superior de Florida, sin embargo, ha ejemplificado en muchos aspectos una tendencia nacional de los políticos, en su mayoría republicanos, a entrometerse en asuntos operativos normalmente reservados a los administradores de las universidades".
La injerencia de los políticos en lo que se puede enseñar en las escuelas ha limitado los temas que los educadores pueden abordar o presentar en las bibliotecas: raza, diversidad e inclusión, educación basada en el género, LGBTQ, y algunos estados, especialmente Florida, han expresado su desprecio por la teoría crítica de la raza.
"En Florida estamos tomando una posición contra el racismo sancionado por el estado que es la teoría racial crítica", dijo el gobernador Ron DeSantis el año pasado. "No permitiremos que el dinero de los impuestos de Florida se gaste en enseñar a los niños a odiar a nuestro país o a odiarse unos a otros. También tenemos la responsabilidad de garantizar que los padres tengan los medios para reivindicar sus derechos cuando se trata de hacer cumplir las normas estatales. Por último, debemos proteger a los trabajadores de Florida contra el entorno laboral hostil que se crea cuando las grandes empresas obligan a sus empleados a soportar la "formación" y el adoctrinamiento inspirados en la CRT."
Muchos estados comenzaron a introducir órdenes de mordaza educativas: los legisladores de Missouri presentaron 18 proyectos de ley, Indiana presentó ocho y Arizona presentó seis sólo en enero.
"Los legisladores están socavando el papel de nuestras escuelas públicas como fuerza unificadora por encima de la política y convirtiéndolas, en cambio, en un campo de batalla de la guerra cultural", dijo Suzanne Nossel, directora general de PEN América, en un comunicado. "Al tratar de silenciar las perspectivas críticas y sofocar el debate, están privando a los estudiantes de las herramientas que necesitan para navegar por un mundo diverso y complejo".
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A pesar de la importancia del contexto histórico de la raza en este país, el año pasado, la UF prohibió a tres profesores testificar en una demanda contra la ley estatal del derecho al voto.
El nuevo informe del profesorado de la Universidad de Florida afirma que los instructores sienten la necesidad de autocensurarse, que se les presiona para que modifiquen el contenido de los cursos y que se les ponen barreras a la investigación.
Lo interesante es que la UF menciona además que "cree que la libertad y la responsabilidad académicas son esenciales para el pleno desarrollo de una verdadera universidad y se aplican a la enseñanza, la investigación y la creatividad. En el desarrollo del conocimiento, los esfuerzos de investigación y las actividades creativas, el profesorado y el alumnado deben ser libres para cultivar un espíritu de indagación y crítica académica y para examinar las ideas en una atmósfera de libertad y confianza."
Proceso de selección del presidente de la UF
A principios de este año, el gobernador Ron DeSantis firmó una ley que hace que las búsquedas presidenciales de las universidades públicas de Florida sean secretas hasta las etapas finales.
Como resultado, la Universidad de Florida no reveló la identidad del senador Sasse hasta las etapas finales: "de acuerdo con el SB 520, se seleccionó un único finalista y se presentó a la Universidad en general", informó la UF. Sin embargo, en respuesta a no conocer los nombres de los otros co-finalistas, el Senado de la Facultad de la UF dio un voto de "no confianza" en una votación de 67-15, en la selección del 13º presidente.
"Estoy agradecido por el voto unánime del Consejo de Administración y por su respaldo a nuestra visión compartida de hacer de la Universidad de Florida una institución que cambie el mundo y sea pionera en la educación superior", dijo Sasse. "La educación bien entendida no consiste exclusivamente, ni siquiera principalmente, en transmitir información. La educación consiste en aprender a comprometerse con nuevas ideas de forma humilde y significativa. Queremos que los Gators se comprometan con las ideas. Quiero que nuestros estudiantes sean desafiados y se alegren del desafío. Queremos que los Gators salgan a servir a Florida y al mundo. Salgamos y construyamos algo grande juntos".
Más instituciones de educación superior en Florida están buscando nuevos presidentes, como las universidades Florida Atlantic y Florida Gulf Coast, "lo que plantea la preocupación de si el clima político del estado está disuadiendo a los candidatos", informa The Chronicle.
Aunque, "Ben está centrado en el futuro del trabajo, el futuro de la guerra y la Primera Enmienda", según informa el sitio del senador por Nebraska. Sin embargo, los estudiantes de Florida no parecen convencidos con la última parte.
En octubre, cuando Sasse fue nombrado único finalista, provocó una intensa reacción de los estudiantes de la UF: la institución prohibió las protestas en el interior del edificio después de que "cientos de manifestantes inundaran el edificio en el que hablaba Sasse, "coreando en voz alta, golpeando con sus puños las ventanas, las paredes y los muebles", dijo el presidente saliente de la UF, Kent Fuchs, a Politico.
"La UF apoya el derecho de la Primera Enmienda a la libertad de expresión y adopta nuestra universidad como un lugar donde la gente puede y es alentada a intercambiar puntos de vista diferentes o a expresar sus sentimientos a través de la protesta pacífica", escribió Fuchs en un mensaje a la universidad en ese momento. "Este compromiso conlleva la obligación de proteger los derechos de todos los miembros de nuestra comunidad a hablar y escuchar".
"El profesorado habría preferido una persona cualificada para el puesto, no un designado político", dijo en un comunicado Paul Ortiz, presidente de la sección de la UF de United Faculty of Florida y profesor de historia. "Nuestros estudiantes trabajan demasiado duro para entrar en esta universidad como para que alguien llegue a la presidencia por su afiliación política".
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