La Unión Americana de Libertades Civiles de Pensilvania (ACLU-PA), una organización sin ánimo de lucro centrada en la defensa y protección de los derechos individuales y las libertades personales, presentó una queja el jueves con el Departamento de Justicia de EE.UU., División de Derechos Civiles, y el Departamento de Educación de EE.UU. alegando que el Distrito Escolar de Central Bucks está "contribuyendo al ambiente hostil para los estudiantes [LGBTQ]".

La queja fue presentada en nombre de siete estudiantes del Distrito Escolar de Central Bucks, detallando los incidentes de tácticas de intimidación, el acoso, junto con las políticas de prejuicios que difunden acciones homofóbicas y transfóbicas. La ACLU-PA investigó los incidentes durante los últimos cinco meses y entrevistó a docenas de estudiantes, familiares, antiguos y actuales profesores, lo que llevó a descubrir un "entorno educativo tóxico para los estudiantes LGBTQ".

En virtud de la 14ª Enmienda de la Constitución de EE.UU. y el Título IX de las Enmiendas a la Educación de 1972, se prohíbe la discriminación por razón de sexo en cualquier programa o entorno educativo-el caso de los estudiantes en Central Bucks.

"Estos niños merecen un entorno seguro en el que puedan aprender y ser plenamente ellos mismos sin temor a ser acosados por otros estudiantes", dijo Witold Walczak, director jurídico de la ACLU de Pensilvania. "Desafortunadamente, en lugar de combatir el ambiente educativo tóxico que enfrentan los estudiantes LGBTQ+ en Central Bucks, una nueva mayoría de la junta escolar y la administración han exacerbado los problemas con nuevas políticas homofóbicas y transfóbicas que han aumentado el clima de miedo para este grupo de estudiantes y personal de apoyo." 

La queja solicita que el Distrito Escolar de Central Bucks se adhiera a las medidas del Departamento de Educación de los Estados Unidos para apoyar a los estudiantes LGBTQ; utilizando un lenguaje acogedor e inclusivo, las políticas escolares respetan todas las sub identidades de los estudiantes, salvaguardar la privacidad de los estudiantes, entre otros.

La queja afirma que "la Junta de CBSD y la administración central han creado una atmósfera de miedo e intimidación que disuade al personal de apoyar a los estudiantes LGBTQ +", con muchos cayendo cómplice de las acciones de CBSD hacia los estudiantes LGBTQ.