Jose Clemente Orozco, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros son conocidos en la historia del arte mexicano como “los tres grandes”. 

Fueron los tres grandes porque vivieron las vanguardias artísticas de 1920 y supieron optar por un camino propio –los murales– que se nutría de las innovaciones en el cambio de técnica para dibujar, entender el color y componer, al tiempo que bebían de las tradiciones del renacimiento para hablar de los intereses de la clase obrera en un momento tan convulso de la historia como lo fue la primera mitad del siglo XX.

Y esto lo hicieron una y otra vez en obras en México y Estados Unidos con proporciones francamente colosales.

Fueron íntimos de los grandes pintores del siglo Picasso y Jacson Pollock entre ellos, el desbocado amor de la gran pintora mexicana Frida Khalo por Diego Rivera pasó a la historia y han sido constante objeto de reflexión desde entonces.

José Clemente Orozco –el mayor de los tres– murió en 1949, Diego Rivera en 1957 y David Alfaro Siqueiros –el más joven– les siguió en 1974.

En 1971 salió el documental Walls of Fire, sobre la obra de ellos tres. Lo dirigieron Herbert Kline y Edmund Penney y lo narró Ricardo Montalbán –quien, sin exageración, tal vez sea el actor mexicano con más apariciones en el cine estadounidense hasta ahora.

Para el momento en que hicieron el documental, Siqueiros era el único de los tres grandes que aún vivía y fue entrevistado. Según un comentario del New York Times, cuando Channel 13 volvió a reproducirlo, ya por 1983, sus comentarios fueron objetivos y con perspectiva.

En esa crítica del NY Times John J. O'Connor dice que el documental tiene algunos problemas de ritmo, pero que las muestras de los murales de Rivera, Siqueiros y Orozco eran maravillosas y, en todo caso, Walls of Fire ganó el Golden Globe a Mejor Documental en 1972 y fue nominado al Oscar a Mejor Documental en 1973.

La estatuilla del Goldel Globe aún se conserva, es parte de la historia del cine y rastro de cómo el cine ha visto la historia del arte latinoamericano.

En este momento está en custodia de la casa de subastas Nate D. Sanders, que el 25 de junio abrirá la pugna al público, empezando con 7.500 dólares.

En este link es posible acceder al sitio oficial de la subasta.