El skateboarding es uno de los deportes que debutan en Tokio 2020. Este deporte, que hasta hace pocos años solo se veía en las calles de las grandes ciudades, llega al máximo nivel del deporte este año para darle un poco de ese espíritu urbano a los juegos. 

Y aunque para muchos la inclusión de este deporte en los Juegos Olímpicos de Tokio es algo polémico, lo cierto es que ha llenado de movimiento y color al certamen. Y también de juventud. 

Si no que lo digan las deportistas que ganaron las medallas de oro y plata en la final femenina, quienes apenas tienen 13 años. Momiji Nishiya dejó el oro en Japón y Rayssa Leal se llevó la plata para Brasil.

Estas dos adolescentes compartieron el podio con otra ‘veterana’, la japonesa Funa Nakayama, de 16, en lo que se convirtió el podio más joven de la historia de los Olímpicos. 

Aunque la juventud de estas deportistas ya es noticia por sí misma, la brasileña se llevó todas las miradas por su popularidad en redes sociales. 

Rayssa alcanzó la fama cuando apenas tenía 8 años y el famoso skater Tony Hawk la grabó haciendo un heelflip, un truco aéreo del skateboarding, vistiendo un vestido azul con alas de hada madrina. 

El video que se hizo viral, convirtió a la pequeña en un fenómeno y hoy la hada en patineta de solo 13 años se coronó como la segunda mejor del mundo. 

“Todavía no me lo creo, parece que fue un hito histórico. Saber que había muchas otras personas que se entrenaron durante años para estar aquí, no solo para el skate, y haber logrado llevar una medalla para Brasil, es muy gratificante”, dijo Leal a la televisión de su país luego de ganar la medalla. 

Más allá de la anécdota, la juventud en este deporte responde a que este es un deporte no solo nuevo en los olímpicos, sino para las mujeres. 

Veteranas como Leticia Bufoni de Brasil y Annie Guglia de Canadá, comentaron a ESPN que sus inicios en el deporte fueron tristes y solitarios, pero que lo que está pasando en Tokio es una semilla para que en las olimpiadas de 2024 compitan muchas más mujeres. 

"Esto es como abrir al menos una puerta, muchas skaters pueden estar hablando con sus padres que quieren comenzar a patinar”, comentó la skater de EEUU Mariah Duran. “No me sorprende que haya al menos 500 niñas comprando una patineta hoy”, concluyó.