El cuadro de la artista mexicana Frida Kahlo "Diego y yo" se vendió este martes por casi $35 millones de dólares en la casa de subastas Sotheby's de Nueva York. La obra es un autorretrato de la pintora mexicana con su pareja Diego, con quien llevó una relación tormentosa durante décadas, según se conoce. 

 

El precio de la obra es el más alto alcanzado en una subasta por una obra de arte latinoamericana. El comprador ha sido identificado como Eduardo F. Cosantini, fundador de un museo en Argentina, según el diario The New York Times.

 

Estas son algunos datos curiosos de Kahlo, Diego y su obra: 

Frida Kahlo es conocida por aplicar un estilo popular a sus autorretratos surrealistas, muchos de los cuales se vio obligada a pintar mientras estaba acostada en la cama después de sufrir lesiones debilitantes en la espalda a causa de un accidente de autobús a los 18 años. 

 

En 1929, se casó con Rivera y la pareja se unió a un círculo sofisticado de intelectuales en México y más allá.

La obra “Diego y yo” fue pintada como un regalo para su amiga artista de Nueva York, Florence Arquin, y su esposo, Sam Williams.

 

Fechada en 1949, la pintura está firmada en puño y letra de Frida como “Florence y Sam con el cariño de Frida. México, Junio de 1949″. 

 

El tamaño total de la obra es pequeñísimo de 30 por 22 centímetros, es decir, más pequeño que una carpeta de colegio regular. 

Esta obra simboliza la tormentosa relación entre Kahlo y Diego Rivera, que aparece dibujado sobre la frente de la mexicana y que a su vez tiene un tercer ojo, un elemento con el que trata de representar la continua presencia de su marido en su mente.

 

Pese a las continuas infidelidades, Frida idolatraba a su marido y lo admiraba como pintor, pues fue su maestro y mentor. 

Eduardo Costantini, nuevo dueño de la obra y fundador del Malba, dijo que la obra podrá ser apreciada por el público el próximo año. 

 

“Por supuesto que va a ser exhibida en el Malba y seguramente va a ser en 2022″, dijo en diálogo telefónico con el portal infobae. 

 

Antes de su compra, el cuadro había permanecido durante 30 años en una colección privada de Texas. Se había exhibido por última vez en 1998.

Con la venta de su pintura por exactamente $34,9 millones de dólares, Frida desplazó a su marido del podio como autor latinoamericano más cotizado (10 millones de dólares en 2018 por su cuadro ‘Los rivales’) y se ubica no solo como la artista latinoamericana con la pintura más costosa vendida sino también como la única mujer.