“Los cántaros cuanto más vacíos, más ruido hacen”, decía Alfonso X, rey de Castilla llamado “El Sabio”.

Y la famosa frase se hace cada vez más certera en los pasillos del Capitolio estadounidense, cuando este miércoles un grupo de republicanos entró gritando a las salas donde Comités de la Cámara llevaban a cabo audiencias sobre el juicio político contra el presidente Donald Trump.

Haciendo eco de las denuncias desesperadas del presidente en Twitter, miembros de su partido decidieron interrumpir en habitaciones donde tres comités de investigación escucharían el testimonio de Laura Cooper, funcionaria del Pentágono que supervisa la política del país en Ucrania.

Según explicó el Washington Post, “la protesta fue parte de un esfuerzo republicano por cambiar la narrativa de los fundamentos en las acusaciones contra Trump”.

Desde hace días que el GOP acusa al presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam B. Schiff, y al partido demócrata en general, de “llevar a cabo un impeachment a puertas cerradas”, a pesar de que los comités se han visto obligados a hacerlo de esta manera por la negativa del Departamento de Justicia de investigar toda la evidencia que ha salido a la luz después de la denuncia del informante de la Casa Blanca.

Según dijo el representante demócrata de California Ted Lieu, los Republicanos violaron las normas de la Cámara al irrumpir en audiencias privadas de Comités a los que no pertenecen introduciendo teléfonos móviles que están totalmente prohibidos en este tipo de situaciones.

Otros miembros republicanos de cada comité siguen pudiendo participar de las audiencias y plantear preguntas a cada uno de las personas que testifican.

La aparente desesperación de los miembros del GOP sigue a las graves declaraciones dadas el día martes por parte del embajador interino en Ucrania, William B. Taylor Jr., quien dijo a los miembros del Comité que Trump quería enlazar directamente la ayuda militar a la condición de que Ucrania investigara las elecciones del 2016 y al ex presidente Joe Biden.

La cruzada republicana contra la investigación de la Cámara llegará a un nuevo nivel después de que el Senador de Carolina del Sur, Lindsey Graham, prometiera introducir una resolución que condene el proceso de impeachment llevado a cabo por los demócratas, argumentando que “cualquier voto sobre el juicio político basado en este proceso, para mí, es ilegítimo, inconstitucional y debe ser desestimado en el Senado sin juicio”.