No es ningún secreto que muchos estadounidenses están frustrados y descorazonados por el estado actual de la política, en concreto por cómo los políticos hacen promesas vacías durante sus campañas, y luego proceden a tomar decisiones con la única intención de ser reelegidos.

Para muchos de los votantes, el político ideal, ya sea que represente a su estado en el Consejo Municipal o en el Congreso, o que sirva como Gobernador o Alcalde, es alguien que sea afín, auténtico, digno de confianza y un líder que se preocupe genuinamente por la gente que representa.

Para su ciudad natal, Nashville (Tennessee), eso es exactamente lo que Odessa Kelly quiere ser para su querida comunidad. Kelly, una demócrata progresista negra y queer con años de experiencia en la organización comunitaria, anunció recientemente su candidatura a un escaño en el Congreso de los Estados Unidos.

Kelly, cofundadora de la organización Stand Up Nashville, no sólo se enfrenta a la audaz empresa de presentarse al Congreso, sino también a una dinastía política local: el hermano de su oponente, John Cooper, es actualmente el alcalde de Nashville en el mismo distrito.

Pero Kelly no se siente intimidada por el desafío. Si vence a su oponente, Jim Cooper, un demócrata moderado, se convertirá en la primera mujer negra abiertamente homosexual en el Congreso.

Para aumentar la confianza y el brío de Kelly, esta cuenta con el apoyo de Justice Democrats, el mismo grupo que respaldó a congresistas progresistas como Alexandria Ocasio-Cortez, Cori Bush, Ayanna Pressley e Ilhan Omar.

Recientemente, Kelly se sentó con AL DÍA para conocer más sobre su trayectoria y lo que planea hacer si es elegida.

Kelly dijo que se siente a la vez increíble y humilde al ser apoyada por los Demócratas de la Justicia. Los líderes del grupo se han puesto en contacto con Kelly a lo largo de los años, diciendo que sería la persona perfecta para presentarse a las elecciones.

"Ha sido una sensación increíble que estas personas te rodeen y se congracien cada vez más con mi propia comunidad y con Nashville, y que hagan todo lo posible para ayudarnos a alcanzar nuestros objetivos", dijo.

Aunque los demócratas de la justicia pueden haber dado en el clavo cuando le dijeron a Kelly que tenía todo lo necesario para ser una buena candidata, ella tuvo que rechazarlos varias veces, porque el momento no era el adecuado todavía.

Como destacada y apasionada organizadora comunitaria, le quedaba mucho por hacer antes de pensar en lanzarse a una campaña. No solo estaba luchando por la igualdad de sus compañeros de comunidad, durante muchos años, su propia salud financiera y su bienestar emocional estaban en juego.

"Hicimos promesas a la gente aquí en Nashville. Y cuando empecé este trabajo, estaba luchando por mi propia vida. No pensaba realmente en [este trabajo] a nivel del Congreso; pensaba en el modo de supervivencia, en lo que tengo delante hoy y en cómo me quito esta presión de encima". explicó Kelly.

Uno de los aspectos de su historia que espera que le dé una ventaja en las próximas elecciones es que ella es realmente una de las personas. Al igual que la mayoría de los estadounidenses, durante algún tiempo, Kelly vivió al día.

"Sólo era una empleada de la ciudad, que trabajaba para Parques y Recreación del Metro, que entraba y salía y que trabajaba con la comunidad, la más empobrecida aquí en Nashville", dijo.

De ser elegida, las principales prioridades de Kelly serían aprobar leyes relativas a una atención sanitaria accesible, combatir el cambio climático y proporcionar a la gente un salario digno.