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Rescatémonos

Hace dos años, 33 mineros pasaron 69 días atrapados 700 metros bajo tierra en la mina San José en el desierto de Atacama, Chile. Luis Urzúa, jefe en turno, fue…

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Hace dos años, 33 mineros pasaron 69 días atrapados 700 metros bajo tierra en la mina San José en el desierto de Atacama, Chile. Luis Urzúa, jefe en turno, fue el último en salir. Lo envolvieron en la bandera chilena al ser abrazado por el presidente Sebastián Piñera, y Ursúa tuvo tiempo de hacer una petición: "Que esto no vuelva a suceder", en referencia a las malas condiciones de trabajo en la mina, responsables del derrumbe. 

Una audiencia global de mil millones de personas en las redes despertó el orgullo chileno y la euforia en la boca del estrecho túnel por el que los trabajadores volvieron a la vida. Dentro de la mina los rescatadores desplegaron una bandera con un mensaje: "Misión cumplida. Chile". Una ola de orgullo nacional inundó al país andino.

El mundo entero se llenó de júbilo y fue testigo del valor de unos hombres que expusieron sus vidas en la operación de rescate al bajar el túnel de 66 centímetros de diámetro y 700 metros de profundidad cubierto de agua y completamente oscuro. La multitud se congregó a orar y finalmente festejar el milagro. La humanidad entera leyó entre líneas…y formuló un propósito: trabajar a partir de ese día en las labores de rescate. Rescate: recuperación o salvación de una persona que está en peligro o en una situación de abandono. ¿Qué es necesario rescatar?, preguntaban los televidentes. "La capacidad de escucharnos y comunicarnos verbal  y espiritualmente. Rescatar la vida en el mundo entero."

El sacerdote los bendijo y terminó con estas palabras: "Rescatemos las virtudes, quizás no enterradas en las entrañas de la tierra, sino del alma y del corazón de cada uno de nosotros. Rescatemos todas las virtudes…la fe y la esperanza, virtudes por las cuales creemos, deseamos y esperamos en Dios con firme confianza la vida eterna, y las gracias para merecerla, porque Dios nos lo ha prometido. Rescatemos la caridad, la virtud por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Rescatemos la prudencia, virtud que dispone de una razón práctica para discernir en toda circunstancia el verdadero bien y elegir los medios justos para realizarlo. 

"Rescatemos la justicia, virtud que consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que les es debido. La fortaleza, virtud que asegura la firme y constante práctica del bien, aún en las dificultades. La templanza, virtud que modera la atracción hacia los placeres sensibles y procura la moderación en el uso de los bienes. Rescatemos la amistad, el respeto, la lealtad, la comprensión, la generosidad; humildad, prudencia, orden, perseverancia, sencillez, y la sociabilidad. Rescatemos por sobre todo…el amor, ese que nos hace llorar, pero de alegría…que nos hace ser uno solo, no importando raza, clase social, credo. Ese amor puro, que existe en cada ser humano y que quizás requiera tan solo ser rescatado. Ese amor que nos llena el alma.

"Gracias a todos los que hicieron posible el éxito de esta misión, sin duda que ellos también rescataron algo en sus propias vidas, de una manera u otra. Rescatémonos hoy…el mañana no nos pertenece. Un abrazo, de esos que llegan al alma… y que estoy seguro recibieron y dieron los mineros al salir de las entrañas de la madre tierra."

El derrumbe de la mina se produjo el 5 de agosto de 2010 en Copiapó, Chile y el 13 de octubre fueron rescatados los mineros a través de la Cápsula Fénix, una especie de jaula metálica diseñada en Chile con ayuda de la agencia espacial NASA, equipada con cuatro tanques de oxígeno para casos de emergencia y un arnés que sostiene a la persona para mantenerla erguida en caso de perder el conocimiento durante el trayecto. La cápsula bajó 800 metros  al interior de la mina para traer a los mineros uno por uno a la superficie. Urzúa, el último en ser rescatado, dedicó gran parte de su tiempo bajo tierra a dibujar los planos del área de la mina en la que permaneció atrapado junto a los otros mineros. Es por eso que fue el que estableció el contacto verbal con el exterior: "Estamos bien y esperando que usted nos rescate", se oyó decir a Urzúa a través de los altavoces colocados fuera de la mina. Ha sido el rescate minero más espectacular de la historia. El presidente Piñeira develó una majestuosa cruz en honor de los 33 trabajadores  rescatados: "33 Mineros de Atacama, el Milagro de la Vida".