Más de tres años después de ser elegido como arzobispo de Filadelfia, Charles Chaput continúa manteniendo su postura de "know nothing" o al menos eso es lo que proyecta con sus palabras y con sus acciones. 

El 2 de mayo Chaput formó parte de un panel interreligioso que se centró en el tema de la "libertad religiosa". No, ¡no es broma! El ambiente fue perfecto, al menos para él, el evento se llevó a cabo en el local de primera clase —Kirby Auditorium— en el Constitution Center, incluyendo panelistas influyentes y con títulos bastantes importantes. 

La pregunta que muchos se harán al leer esto es ¿en qué se basa este sujeto para hacer tales aseveraciones? y la respuesta a esta pregunta es llana y simple, porque ésta es una de las características que han dañado a la iglesia católica, ya que el impacto negativo viene de adentro y no de afuera y la insensibilidad y/o quizás la arrogancia de los líderes católicos actuales queda en evidencia al seguir la agenda de Chaput y sus más cercanos colaboradores. La cual indica que sin títulos o sin poder los feligreses o miembros de la comunidad no podemos ni siquiera  aspirar a una oportunidad de entablar un diálogo con ellos.

Estoy seguro que el arzobispo recuerda sus propias palabras publicadas en la edición de enero del 2012, en este mismo periódico en la cual afirmó que se sorprendía de "la poca presencia hispana, incluso en el escenario" durante la conmemoración del 11 de septiembre. También dijo que "era importante que ellos (nosotros) demanden su puesto de liderazgo", agregó también que culpaba y responsabilizaba a los padres de las segundas generaciones de inmigrantes por no promover/reforzar  e inculcar la fe católica en nuestros hijos. Lo insólito de todo esto es que en la promoción de "The Manhattan Declaration in Philadelphia", tema durante dicho panel se hizo alusión varias veces a la importancia de luchar por lo que uno cree y uno de los oradores hizo énfasis en las palabras de J. Madison cuando este escribió que "la conciencia es lo más sagrado de nuestras pertenencias". ¿Será acaso que la conciencia de los líderes o personajes influyentes tiene más valor que la de nosotros en el pueblo? o ¿será tal vez que el cargo de conciencia en algunos de ellos es mucho mayor debido a las malas decisiones que se han tomado en los últimos años?

Como católico yo tomo mi responsabilidad al tratar de instruir y haciendo que mi familia participe activamente en nuestra fe y mantengo mi postura al decir que la inversión necesita hacerse mayormente en la gente, la feligresía, y tomando en cuenta la opinión de la misma.

Seguramente, estas palabras serán analizadas por la arquidiócesis o por el mismo Chaput y me gustaría preguntarles a ellos cuál es su postura actual con respecto a tener una reunion con los miembros que se oponen al cierre de parroquias, especialmente con los miembros de " La Milagrosa", "San Leo", y "San Joaquín".

Es curioso que a pesar de que este año se celebra el 150 aniversario de la consagración de la catedral, solamente hemos recibido un par de cartas solicitando contribuciones económicas para la misma, tal vez monseñor Rodgers está demasiado ocupado colectando el pago de "la entrada" a los conciertos que últimamente se ofrecen con más regularidad en tan "espectacular escenario". Me pregunto también por qué el papa Francisco no mantuvo una recepción privada hace unas cuantas semanas cuando Chaput llevó "tremenda" delegación al Vaticano ¿será que el papa ha notado algo de lo que está pasando aquí en Filadelfia? ¿o sera que la reunión mundial de familias programada para septiembre del 2015 será el escenario perfecto para reflexionar y demostrar el rompimiento de familias que ocasionó el cierre abrupto de escuelas y parroquias en los últimos años?

El mensaje de Juan durante el evangelio de la semana santa no puede ser más claro... "si he faltado al hablar, demuestra en que he faltado; pero si he hablado como se debe, ¿por qué me pegas?"

Ustedes los "maestros de la ley" tiene un reto abierto al cual deben responder, ya que nosotros estamos dispuestos a tomar nuestra responsabilidad de una forma concreta y clara y no nos conformaremos con reproches sin bases y sin sentido ya que nosotros sí creemos que la fe no solamente puede pagar los recibos sino que incluso puede mover montañas, ¡ojalá mueva su conciencia y sus corazones!